En vinos, el Sur también existe

Todo lo que quedó de la Expo Vinos de la Patagonia tras una recorrida de Yo Como por la feria.

En vinos, el Sur también existe

Todo lo que quedó de la Expo Vinos de la Patagonia tras una recorrida de Yo Como por la feria.

Fotos: Claudia Martínez

El sur también existe

Pasó Expo Vinos de la Patagonia en Buenos Aires, la primer feria que logró reunir en un mismo sitio a 25 bodegas del sur argentino (La Pampa, Río Negro, Neuquén y Chubut) y a cocineros de dichas provincias.

Una feria es un éxito cuando todos dicen que el lugar ha explotado, que ha quedado chico, obviamente no desde la incomodidad sino desde la sorpresa. Comentarios que no paraban de escucharse.

Los productores de cada bodega explicaban con pasión a los cientos de curiosos, amateurs, enófilos y público en general las características de cada vino en un paréntesis del jueves porteño de la pasada semana.

La Patagonia no se guardó nada, luego de crear Wine of Patagonia (WOPA) las principales bodegas del sur lograron trasladar su impronta a la capital.

En el hermoso restaurante Novecento Bellas Artes se instaló la armada cocinera.

Pablo Buzzo, Leo Morsella y Ezequiel González, un trío de ángeles representando Neuquén. Siempre es un placer volver a probar la cocina de ellos. Tipos que tienen tatuados los caminos de la provincia capicúa.

Sirvieron jamón dulce de trucha de la hermosa Alicurá en pan de nuez, emulsión de rúcula y manzana y polvo de olivas. También te volaban la cabeza con una gírgola apanada, cremoso de queso de cabra y peras en vinagreta de merkén.

Por el lado de Río Negro, Mariana Müller y Federico Domínguez Fontán, dos faros inmensos que alumbran desde Bariloche presentaron un lomo de ciervo (el punto increíble) y relish de frutos rojos además de una sopa de quesos con eneldo y pan de campo que daban ganas de cargarse una olla y llevársela a casa.

La Pampa fue representada por Florencia Borsani y Ricardo Belfiore que cocinaron empanadas de cordero pampinta braseado (aplausos de pie), chimichurri de jarilla y sal de Macachín. También presentaron una entraña pampeana, humita cremosa, alioli de pimienta rosa y focaccia.

Chubut llevó a la expo un aire de mar y montaña campera profundo y sabroso con dos tipos que saben y mucho. Pablo Soto y Juan Lucero pusieron la vara alta con sus langostinos en ajillo, mostaza de pepinos, crocante de algas wacame y longaniza de cordero, repollo fermentado y picante de rosa mosqueta.

Mientras tanto en una carpa anexa al restaurante las 25 bodegas llenaban las copas de los visitantes. Esta feria sirvió también para presentar públicamente algunas novedades en etiquetas.

Bodega Aniello, de Río Negro con su nuevo rosado de Pinot; Fin del Mundo que lanzó Red Blend sumándole un muy buen vino a su portfolio; Sangre Azul, un blend de chardonnay de Patritti que deja toda la boca repleta de magia.

Otra de las novedades fueron las burbujas del Pampa Mía Blanc de Noirs de bodega Del Desierto.

Bien por la impronta del norte neuquino con Bodega Des de la torre y su pinot reserva, “El Hijo Rosado Del Diablo Negro”.

También Flia Schroeder con Saurus pinot noir rosé, tapa a rosca y mil aromas de primavera.

No hay Patagonia si no se pasan los 5 sentidos por las producciones de Humberto Canale. Bodega centenaria, de la vieja escuela con una mirada futurista de los vinos. Su línea Old Vineyards es todo lo que está bien en este mundo.

WOPA nace con carácter de defender y promover la región patagónica y sus vinos. Actualmente el territorio del sur argentino viene ganando protagonismo en el escenario vitivinícola del país transformándose de a poco en la segunda región más importante.

Mi ranking de la feria:

Momentazo de mini vertical improvisada de Special Blend de Fin del Mundo. 2003, 2006, 2010 y 2013. Me sigue pareciendo gloriosa la cosecha 2010 en general en Patagonia.

Mis charlas con Marcelo Miras y su blend de blancos, siempre es un placer conversar y probar los vinos de uno de los enólogos protagonistas del desarrollo del sur y de cepas que necesitaron un empujón importante para volver a instalarse

El espumante tradicional de Bodegas Agrestis sigue picando en punta en su línea. Es un éxtasis constante, podría beberlo hasta que me haga viejito.

El encuentro con el enólogo Nicolás Navío de Bodega Patritti y con Agustín Lombroni de bodega Del Río Elorza y sus mágicos e intensos pinots.

El salto evolutivo año a año de Bodega Del Desierto y el descubrimiento de los diferentes proyectos de La Pampa.

Muy bien Videla Dorna y su Calfulén Malbec. Fruta y estilo en uno de los nuevos y creo, futuros estandartes de la bodega.

Sorprendido por la evolución de Gerome Marteau, se nota un cambio en su estilo y la evolución en botella de cosas tan ricas como el pinot noir.

Y por último esperanzado en el desarrollo del paralelo 42, Chubut, allí donde la Patagonia suma un polo impresionante. Ya hay más de 25 productores elaborando vino en condiciones meteorológicas amplias, particulares y profundas.

En líneas generales fue una excelente feria, con un futuro prometedor que contó con financiamiento del Consejo Federal de Inversiones y el acompañamiento de los gobiernos de Río Negro, Neuquén, Chubut y de la Pampa.


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