En medio de la pandemia, el autocine es la salida del fin de semana en Fernández Oro
Ya asistieron alrededor de 400 vehículos al predio de La Masía. Las noches del viernes son elegidas por los jóvenes, pero el domingo les toca a las familias.
El autocine de La Masía tiene capacidad para 200 vehículos. (Foto: Twitter Edgardo Pino)
A mediados de octubre, abrió el autocine de Fernández Oro en el predio de La Masía. Desde entonces, ya 400 vehículos ocuparon el predio y sintonizaron sus frecuencias para disfrutar de un fin de semana de películas en familia o con amigos. Viernes, sábados y domingos, el parque del salón de eventos enciende sus pantallas con diferentes contenidos para todo tipo de público.
«Notamos que el viernes era un día en que asistían muchos jóvenes», observó uno de los propietarios del salón de eventos, Juliano Bilo. Señaló que, por eso, arrancan el fin de semana con contenidos para ese tipo de público, con películas de terror.
Hoy emitirán «La Noche de Halloween», como especial por la celebración estadounidense de la Noche de Brujas. Esperan recibir un promedio de 70 vehículos, tal como sucedió los dos viernes anteriores, según indicó Bilo.
El organizador explicó que les cuesta identificar al público del sábado, ya que es el día de menor asistencia. Por eso buscarán atraer a los cinéfilos que se inclinan por las películas clásicas y el cine argentino. Mañana a las 21:45, transmitirán «El secreto de sus ojos», apostando por una alternativa nacional.
El domingo le toca a la familia. Notaron que muchos padres con hijos buscan pasar una noche diferente y familiar. Bilo señaló que pensaron en films animados e infantiles, para ese tipo de audiencia. Este fin de semana, cerrarán la grilla con el éxito de Disney del verano de 2017 -2018, «Coco».
El propietario de La Masía afirmó que el domingo asisten muchos vehículos, aunque recalcó que no supera a la noche del viernes. Indicó que hay un promedio de 200 autos por fin de semana, con un pico de 70 el primer día: «Hay mejor respuesta los viernes y los domingos».
Pese a que hubo una buena recepción del servicio, Juliano Bilo enfatizó que las restricciones entre la provincia de Neuquén y Río Negro desincentivan la concurrencia, pues «no saben si pueden venir o no».
Admitió que los neuquinos se las rebuscan para asistir, ya que no hay una propuesta similar en las localidades de la Confluencia. Además, personas de las diferentes ciudades valletanas viajan a Fernández Oro para pasar una «noche diferente», de esas que muchos jóvenes solo han visto a través de las películas.
Bilo indicó que su público es muy variado. «Vienen desde Roca, Allen, Cipolletti», más otro sector que evade los controles y llega desde la capital neuquina hasta el predio de La Masía.
El organizador anheló que se unifiquen los criterios y horarios de circulación entre ambas provincias, por lo menos entre las localidades del Alto Valle. Resaltó que por la prohibición de circulación que rige en Neuquén después de las 20 horas, muchas personas se quedan sin disfrutar del autocine.
Los propietarios de La Masía presentaron un protocolo estricto para poder garantizar entretenimiento sin contagios por coronavirus.
Bilo señaló que se aconseja llegar media hora antes de la función, si es que se quiere tener un buen lugar para disfrutar de la función. Cada uno ingresa sin descender el auto, se ubica según el orden de llegada y sintoniza la frecuencia radial para acceder al sonido.
Además, en el sector están distribuidos diferentes food truck que reciben los pedidos por Whatsapp y acercan los encargos a los rodados. Así, la audiencia solo se baja de los vehículos para ir al baño dentro del salón de eventos.
Bilo indicó que los food trucks ofrecen comida, bebidas y pochoclos.
Las entradas se venden a través de la plataforma Event Pass, pero también se pueden abonar en puerta. Decidieron habilitar esa segunda opción, ya que «no todos pueden comprarlas por internet».
Bilo señaló que en un principio se había pensado en transmitir dos funciones, pero la puesta de sol, que cada vez comienza más tarde, complicó que pudieran ofertar dos horarios.
Explicó que como solo tienen autorización para abrir hasta la 1, no les da el tiempo para emitir dos películas en una misma noche, ya que necesitan completa oscuridad para que la imagen se visualice.
Decidieron transmitir una función diaria: los viernes y sábados a las 21:45 y los domingos a las 21:30.
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