Robaron 3.000 pesos de una distribuidora de papel

NEUQUÉN (AN).- Dos delincuentes armados ingresaron a la distribuidora de papel, redujeron a los cinco empleados y se alzaron con un monto superior a los 3.000 pesos. Un trabajador que intentó esconder el celular fue agredido con culatazos en la cabeza por lo que debió ser hospitalizado. El robo se concretó alrededor de las 20:15 del miércoles cuando la papelera ubicada en San Martín 749 se encontraba concluyendo su actividad comercial. Aprovechando la oscuridad los dos sujetos ingresaron arma en mano y redujeron a los cinco empleados del local bajo amenazas de muerte. Lejos de oponer resistencia los trabajadores se arrojaron al suelo acatando las órdenes que impartieron los delincuentes. Fue durante esa maniobra que un empleado arrojó el celular a una caja para evitar que se lo robaran. El movimiento fue advertido por uno de los delincuentes que le dijo: ‘Vos te hacés el vivo’ y le aplicó culatazos en la cabeza provocándole un corte profundo en el cuero cabelludo que derivó en una significativa pérdida de sangre. Posteriormente los ladrones maniataron con alambres a todos y los dejaron en la parte del depósito del edificio. Con todo el campo liberado, se hicieron de los celulares de sus víctimas y la recaudación de la caja registradora que ascendía los 3.000 pesos. La huida la emprendieron a pie pero la policía supone que en las inmediaciones había algún tipo de vehículo esperándolos para sacarlos rápidamente del sector. Además manejan la hipótesis de que le habrían hecho algún trabajo de inteligencia al comercio para determinar qué tipo de movimiento se registra durante la jornada y cuál era el horario oportuno para dar el golpe. Personal de la comisaría Primera arribó a los pocos minutos al local comercial y mientras unos efectivos iniciaban el operativo de rastrillaje, otros dispusieron el trasladado del joven lesionado al Hospital Regional donde se le realizaron las curaciones del caso. La búsqueda de los ladrones cesó sin mayores datos, de hecho al cierre de esta edición fuentes oficiales confirmaron que aún no lograban dar con el paradero de los delincuentes. Si bien se denunció el robo por 3.000 pesos los empleados iban a ampliar la exposición ni bien concluyeran con el arqueo de caja para confirmar la cifra sustraída. La causa quedó caratulada como robo calificado con lesiones a cargo del Juzgado de Instrucción 1.