Terminal vacía: por protesta impiden el ingreso de colectivos

La medida fue resuelta por los empleados de maestranza que reclaman un plus por trabajar los fines de semana. Los pasajeros debieron subir y bajar de los micros por calle 12 de septiembre.

El conflicto en la terminal de ómnibus se agudiza cada día más. En las primeras horas de ayer, los trabajadores de maestranza, que reclaman el pago adicional por horas trabajadas durante el fin de semana, cortaron el ingreso y egreso de colectivos.
La protesta obligó a los pasajeros a descender y subir sobre calle 12 de septiembre, lo que provocó congestionamiento de tránsito y enojo de los automovilistas.

Luego de cinco días de retención de tareas, la suciedad y la basura desparramada incrementaron el malestar de los usuarios y comerciantes.

Alrededor de 300 servicios diarios circulan por la terminal neuquina.

La empresa concesionaria Parada Liniers radicó una denuncia en la Fiscalía General por “entorpecimiento del servicio público de pasajeros”

“Vinieron desde Buenos Aires, y no nos dieron ninguna respuesta. Por eso hasta que no haya una solución no entra ningún colectivo”, sostuvo Ramón Fernández, secretario Gremial del Centro de Empleados de Comercio, que nuclear a los trabajadores.

El sindicalista agregó que de no mediar un acuerdo con la empresa existe la posibilidad de cortar las calles aledañas a la ETON.

Por su parte el gerente general de la terminal, Luciano Fernández aseguró que les acercaron una propuesta de 500 pesos por fin de semana trabajado, “pero la rechazaron de plano”.

El conflicto comenzó a principios de agosto con retención de servicios los días sábados por la tarde y los domingos todo el día. El pasado viernes, los trabajadores suspendieron el servicio de limpieza por tiempo indeterminado y ayer bloquearon el acceso de micros hasta el atardecer. La protesta también afectó el servicio de anuncio por altavoces de arribos y partidas.

La situación generó malestar en los pasajeros que perdieron sus pasajes y comerciantes que notaron la baja en sus ventas. “No fue la mayoría, pero registramos casos. Igual se reprogramaron varios viajes y algunos coles volvieron a buscar a los pasajeros” dijo un empleado de una empresa de transporte.

Los cinco días de huelga, generaron en la ETON una notoria falta de higiene, suciedad en los pisos y un fuerte olor en los baños. “Que esté todo así, hace que la gente se vaya rápido y perdemos a los clientes” contó una comerciante de la terminal.

Los pasajeros consultados mostraron su indignación por la falta de limpieza, pero resaltaron la importancia de que no se interrumpió el servicio publico de pasajeros.

“Estoy esperando que me avise la chica de la empresa para ir a tomar el cole afuera” dijo Maris, que se dirigía a San Martín de los Andes.

Ayer alrededor de las 20 los trabajadores se retiraron del ingreso a la terminal, con la promesa de retomar la protesta a partir de las primeras horas de hoy, con la misma metodología, según informó el dirigente gremial.

Antes de levantar el bloqueo, los manifestantes permitieron el ingreso de los micros.

“Los que trabajamos acá decidimos limpiar el patio de comidas. Nadie come entre la mugre. La gente se va y perdemos ventas”.

Noelia, encargada del local de ventas de la heladería Parolle.

Los puntos centrales

del reclamo

Los trabajadores reclaman que se les paguen doble las horas trabajadas los sábados por la tarde y los domingos, tal como lo establece el convenio colectivo de trabajo de empleados de comercio.

La empresa asegura que deben acoplarse al “convenio de trabajo en equipo”. Fundamentan que se presta un servicio y no se comercializa productos.

El descuento de los días de paro por parte de Parada Liniers es otro punto en conflicto. Los empleados exigen el pago de los días descontados del mes de agosto.

La palabra del

Municipio

El subsecretario de Servicios Concesionados municipal, Alejandro Hurtado, aseguró que se subcontrató a una empresa para garantizar la limpieza de los baños. Además se dispuso un operativo de tránsito para que los pasajeros puedan descender y ascender de los micros sobre calle 12 de septiembre, sin riesgos.

El funcionario aclaró que el Municipio no es parte en el conflicto. “Es un problema entre los trabajadores y su empresa. Lo único que podemos accionar son las pautas del contrato. Lo vamos a revisar para tener una precisión de los pasos a seguir”, manifestó Hurtado.

Datos

“Los que trabajamos acá decidimos limpiar el patio de comidas. Nadie come entre la mugre. La gente se va y perdemos ventas”.

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