A Kazán, con o sin entrada
Cambió el cuadro, aumentó la expectativa y la reventa está a la orden del día. Muchos de los hinchas de la zona que viajaron a Rusia tienen que hacer malabares para estar contra Francia.
El Mundial experimenta sucesos y resultados que no se esperaban. Entre ellos, que Argentina pase como segundo del Grupo D y Croacia haya sido el mejor de su zona ganando los tres partidos. También la eliminación del último campeón Alemania.
Pero la repercusión de estos resultados no se resume a datos estadísticos, sino que también influye sobre la estadía de los hinchas que viajaron a apoyar. Es que la mayoría de los que sacaron con anticipación su ticket para octavos lo hicieron suponiendo que la selección ganaría el grupo.
Entonces, esos boletos sirven para ver Croacia-Dinamarca, que no reviste interés.
Por un lado, la posibilidad de canje de una entrada por otra da un margen de maniobra. El problema es encontrar con quién hacer ese trueque en un país ajeno, con otro idioma. Las redes sociales son una herramienta fundamental para ello.
Pero lo que más difícil la tienen son los que no tienen entradas, porque la reventa tiene precios que promedian los 1200 dólares. Al tipo de cambio de hoy es una cifra que supera los 30 mil pesos.
Teniendo en cuenta la corrida cambiaria que se dio hace un par de semanas, este dato no es menor. En este contexto, los hinchas hacen gestiones, dentro de sus posibilidades, para concretar el sueño de seguir acompañando a la selección.
Mientras tanto, los que tienen boletos y los que no, se organizan por whatsapp para alquilar autos u otros medios de transporte para llegar desde San Petersburgo o Moscú a Kazán.
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