A un mes de la toma de la UNRN, crece la tensión

Las autoridades propusieron suspender el tramite judicial contra dos docentes con una “probation”, pero fue tomado como una “extorsión”. Aparecieron pintadas con mensajes intimidatorios.

La ocupación del Vicerrectorado de la sede Alto Valle de la Universidad Nacional de Río Negro, ubicado en calle Isidro Lobo 516 de Roca, continúa en pie luego de 30 días. Ayer las autoridades de la casa de estudio comunicaron que avanzan en la posibilidad de suspender el tramite judicial iniciado contra dos docentes, en caso de que se lleve adelante inmediatamente el levantamiento de la toma. La asamblea Interclaustro, que lleva adelante la medida de lucha, insiste que se trata de una “extorsión” y responsabilizan directamente a las autoridades de la prolongación del conflicto.

La medida encabezada por estudiantes y docentes de Cipolletti comenzó el 12 de septiembre en adhesión a una reclamo a nivel nacional en defensa de la educación pública, donde se exigía un mayor presupuesto para todas las universidades públicas de país. A raíz de la judicialización del conflicto, luego de la denuncia del vicerrector Carlos Arzone, los ocupantes decidieron permanecer en el lugar y pese a varias instancias de negociación aún no logran establecer un acuerdo.

Ayer a través de un comunicado, la UNRN expresó la voluntad de avanzar junto al fiscal de la causa en una “probation” para las dos docentes imputadas en la causa, en caso de que se decida como primer paso la desocupación inmediata del edificio del vicerrectorado de Roca. La propuesta fue presentada justificando que ”la universidad no criminaliza la protesta social”.

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En caso de que las partes involucradas lleguen a un acuerdo se daría lugar a una “probation” y se suspendería la continúan del proceso judicial, que posibilitaría el sobreseimiento definitivo. De ser así, las imputadas a las que se les atribuyen los delitos de usurpación, coacción agravada, intimidación pública e instigación a cometer delitos, deberían cumplir con una acción reparadora.

Sin embargo, los estudiantes que llevan adelante de la toma manifestaron que los términos planteados por las autoridades universitarias se enmarcan como una “extorsión”, donde deslegitiman el espacio de asamblea, subestimando el poder de actuar y de decisión de los estudiantes.

También resaltaron que “fueron las autoridades quienes se negaron a la continuidad de resolver este conflicto en el marco institucional, haciendo caer dos instancias de diálogo; dejando la resolución de este conflicto en manos de la justicia y dando vía libre al actuar no solo del poder judicial sino también de la policía federal. Violando así la autonomía universitaria y el estatuto de la UNRN”.

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El conflicto sigue latente, los estudiantes continúan exigiendo que se retome la instancia de negociación con el rector Juan Carlos Del Bello o autoridades representante. Mientras que la universidad decidió hace una semana el cierre total del dialogo a raíz del “permanente cambio de las condiciones que ponen los ocupantes” para hacer efectivo el levantamiento de la medida.


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