Acuerdo nuclear entre Rusia e Irán

MOSCU.- Rusia, que alcanzó un acuerdo con Irán que abre el camino a la República islámica para poner en actividad su primera central nuclear, se dispone a ser criticada por Estados Unidos, opuesto al proyecto. Poco después de la firma del tratado sobre la entrega de combustible ruso a la central nuclear de Buchehr (sur de Irán), que exige a cambio la devolución del uranio usado.

Moscú insistió en el hecho de que el convenio no implica una entrega «en lo inmediato».

«La firma entre Rusia e Irán de un acuerdo sobre la repatriación del combustible utilizado no significa la entrega inmediata de combustible nuclear a este país», declaró el portavoz del ministerio ruso de Relaciones Exteriores, Alexandre Iakovenko, citado por la agencia Interfax.

El funcionario añadió que el combustible nuclear sólo sería entregado a Irán cuando Buchehr «esté lista».

Es decir, no antes de mediados de 2006, según el jefe de la agencia rusa de energía atómica, Alexandre Rumiantsev, quien señaló este domingo que la central se inaugurará «a fines de 2006» y la entrega de combustible se hará seis meses antes. Estos matices rusos se dirigen en primer lugar a Washington, en momentos en que la cooperación nuclear ruso-iraní es uno de los principales temas de desacuerdo entre Moscú, convencido de que Irán no tiene intenciones de fabricar armas atómicas, y Estados Unidos, que acusa a Teherán de querer dotarse de ellas escudándose en un programa nuclear civil.

El presidente ruso, Vladimir Putin, dio a entender, luego de la cumbre Rusia-EE. UU., que compartía «posiciones cercanas» a las de su par estadounidense, George W. Bush, acerca de Irán.

(DPA)