Acusan a desocupados de amenazar a un funcionario

NEUQUEN (AN).- La municipalidad de Neuquén denunció ayer que el jueves pasado «un grupo de personas armadas se presentó en las oficinas» del subsecretario de Acción Social de la comuna, Marcelo Barberis, a quien se le exigió entrega de dinero.

«No llegaron a apuntarle, pero hicieron ostentación de armas (de fuego); en una evidente acción de «apriete» que fue debidamente denunciada. Esto se tiene que terminar», afirmó una alta fuente de la municipalidad en diálogo con este diario. La decisión de terminar con este tipo de situaciones fue del propio intendente Horacio Quiroga quien contó que hace un tiempo también hubo amenazas contra la funcionaria Marta Búffolo. En ese tren, el jefe comunal ordenó reforzar los controles de acceso al Palacio Municipal.

El caso se mantuvo bajo un total hermetismo hasta ayer cuando el secretario de Gobierno, Marcelo Inaudi, salió a los medios para contar lo sucedido. Es que el lunes, por orden del juez de instrucción, José Luis Cartolano, el grupo de especial de la Policía (Despo) detuvo por cuatro horas a seis dirigentes del Movimiento de Trabajadores Desocupados, entre los que estaba el presidente de la comisión vecinal de San Lorenzo, Heriberto Chureo. A poco de recuperar la libertad -tras permanecer en la comisaría Primera- los miembros del MTD denunciaron «persecución» por parte del gobierno y dijeron que la denuncia la había formalizado Barberis. Los dirigentes negaron haber amenazado al funcionario, quien ayer estaba en Buenos Aires. «Esto es muy grave; que sepan que no nos va a temblar el pulso para denunciar estas actitudes de parte de estos grupos, que son minoritarios y que pretenden lucrar con los graves problemas que afrontan muchos vecinos de la ciudad», fue elocuente el secretario Inaudi.

Una alta fuente de la comuna admitió que la municipalidad denunció públicamente el caso tras la repercusión que tuvieron las afirmaciones que con respecto al caso realizaron el lunes los dirigentes del MTD. La misma fuente comentó la semana pasada el intendente Quiroga firmó un decreto para despedir a Chureo que «es un empleado municipal que nadie sabía qué función cumplía».

Entre las personas demoradas por la Despo, además de Chureo, estaban los dirigentes Sergio Aguirre, Manuel Carrasco y Héctor Garrido. Barberis, quien fue a la Policía acompañado por Quiroga, dio nombres y apellidos de los presuntos amenazadores.