ECOS DE LA MEMORIA

El viernes 29 y el domingo 31 de agosto sube a escena al teatro El Arrimadero, Ecos de la Memoria, una obra que invita a un viaje íntimo y poético entre el pasado y el presente. La historia sigue a Mariana, una joven que, al indagar en la vida de su familia atravesada por la migración italiana, se encuentra con los sueños, los gestos y las ausencias que aún resuenan en su propia vida. Sobre “ECOS DE LA MEMORIA” El texto, escrito por Verónica Constancia García, propone una mirada sensible sobre la identidad, la herencia cultural y el desarraigo, explorando cómo lo vivido por generaciones anteriores se filtra en lo cotidiano: en los aromas, las palabras, los gestos y hasta en los silencios. Como expresa la autora: “Porque la calesita nunca deja de girar. Porque la vida sigue. Y tantas cosas van a seguir pasando, aunque parezca que el sueño terminó.” Una puesta simbólica y minimalista La puesta en escena diseñada por Pablo Donato apuesta a una estética visual depurada y cargada de simbolismo. Tres paneles móviles recubiertos de tela translúcida delimitan el espacio dramático, a la vez que se transforman en pantallas retroiluminadas donde aparecen imágenes como flores, un árbol o una calesita. Esa combinación de movimiento, luz y proyección acompaña el recorrido emocional de los personajes. La escenografía se completa con una mesa, dos sillas y dos bancos, junto a objetos distintivos que identifican a cada figura. La iluminación, utilizada como recurso narrativo central, guía al espectador en el paso del tiempo y en la intensidad de lo simbólico.