Al Kassar: «Menem ordenó mi pasaporte»

BUENOS AIRES.- El sirio Monzer Al Kassar quedó procesado como presunto autor de un delito de falsedad ideológica de instrumento público y uso de documento falso, en la causa iniciada el 8 de mayo de 1992 ante las graves irregularidades cometidas para la obtención de su radicación y posterior nacionalización. Al Kassar, asistido por sus abogados Víctor Stinfale y Carlos Varela Alvarez, compareció ayer por la mañana, por espacio de una hora y media, ante el titular del Juzgado Federal número 2 de la Capital, Jorge Luís Ballesteros.

El magistrado le notificó el auto de procesamiento y le otorgó la excarcelación, al aceptar como caución real en fianza, la escritura de la vivienda ubicada en la avenida del Libertador 5346, 4º piso, propiedad del sirio. No obstante, los abogados del traficante residente en Marbella, apelaron la medida decretada por el magistrado. El sirio, arribó a la sede del juzgado ubicada en el barrio de Retiro en un Alfa Romeo color verde, patente CMY 372 y rapidamente accedió al despacho de Ballesteros, ubicado en la tercera planta del edificio.

Tras prestar declaración indagatoria, Al Kassar aseguró que obtuvo la residencia y el primer pasaporte para extranjeros en 1991, por «orden del presidente Menem durante una comida celebrada en la Casa Rosada» y que, ademas, tuvo «la ayuda de un funcionario de mucha confianza de Menem» para la realización de los trámites pertinentes en las dependencias de la Policía Federal. Cuando se le preguntó si el ex presidente Menem le había facilitado ropa para la obtención de la fotografía de su pasaporte y cédula federal 13.363.273 dijo: «Sí, me las entregó de su propia mano».

El traficante de armas -que es pariente en segundo grado de Menem a través de su familia materna- ratificó lo que ya había declarado años atrás ante el juez español Baltasar Garzón, quien lo envió a prisión durante un año y medio acusado de colaboración con la organización terrorista que secuestró el buque italiano Achille Lauro. En el juicio celebrado en 1995 en la Audiencia Nacional española, varios testigos de cargo se retractaron misteriosamente, por lo que Al Kassar fue absuelto por falta de pruebas,

Ayer, a la salida del tribunal, Al Kassar aseguró que era víctima de falsas acusaciones y justificó la celeridad en obtener la documentación argentina al compararse con la situación de «miles de coreanos que consiguen la ciudadanía más rápido».

En un español defectuoso, definió a Menem como su «paisano» y enfatizó mantener «una muy buena relación tanto con Munir Menem como con Amira Yoma». El sirio admitió que asiste frecuentemente al restaurante marbellí que regentea la que fuera secretaria de Audiencias de la Presidencia durante el primer mandato de Menem: «somos amigos de muchos años y como paisanos tenemos buena relación con Amira y el señor Chacho», en referencia al esposo de la Yoma, Jorge Marchetti.

Más adelante, Al Kassar negó cualquier clase de relación con la venta ilegal de armamento argentino a Croacia ya que -según dijo- «nunca trafiqué armas». Sin embargo, poco después incurrió en una contradicción cuando admitió haber participado como agente en una operación para vender «siete barcos argentinos», la cual fracasó por las pretensiones económicas de otro intermediario al que no quiso identificar, alegando «el secreto del negocio».

En el auto de procesamiento de 28 páginas notificado ayer a Al Kassar, el juez Ballesteros califica como «llamativamente veloz» la diligencia de la obtención del pasaporte argentino del sirio, e involucró en las gestiones a Amira Yoma y al actual juez federal de Mendoza, Gerardo Walter Rodríguez. Sostiene el magistrado en su resolución que «el singular tratamiento que recibió(Al Kassar) de las autoridades oficiales, no justificaba en modo alguno, no ya las irregularidades que se han detallado, sino las notables ventajas de que gozaba». Respecto de estas prerrogativas recibidas por el traficante sirio, el juez afirma que las investigará al no estar las mismas aún determinadas. Ballesteros desea establecer si la ayuda suministrada a Al Kassar «se trató de una actividad encaminada a obtener a favor de numerosas personas de origen árabe o sirio su nacionalidad argentina». .

El juez Ballesteros también libró oficio a la Comisión de Juicio Político del Congreso solicitando todos los antecedentes del enjuiciamiento «rechazado» de Rodríguez, quien se mantiene al frente del Juzgado Federal número 2 de Mendoza.

(Télam, DyN, Infosic y EFE)