Analizan la posibilidad de abrir más sucursales del Correo en la Línea Sur

ROCA (AR).- Un proyecto para ampliar el número de sucursales del Correo Argentino en Río Negro fue entregado al presidente Néstor Kirchner durante su visita a Roca de la semana pasada.

Esta iniciativa, que el Presidente prometió analizar personalmente, incluye un análisis sobre el rol y las características del servicio público y la posibilidad, gracias al superávit de la empresa, de extender la red prestacional hacia las localidades de la Línea Sur.

«La propuesta incluye la extensión del servicio de correo hasta localidades como Cerro Policía, Aguada Guzmán, Mencué o El Cuy», informó Jorge Echeverría, trabajador del correo y secre

tario adjunto del gremio Ajeproc.

Echeverría resaltó la importancia de la iniciativa explicando que «la gente de estas localidades a veces tiene que recorrer hasta 130 kilómetros para pagar un impuesto o cobrar algún plan, además de usar el servicio postal. De extenderse la red hacia la Línea Sur, esto se podría hacer a través de una oficina de correo».

Por otro lado, el dirigente comentó: «Nuestra política como gremio es la de aportar a un proceso de reconstrucción de un instrumento tan importante como el correo. Es la red prestacional más grande del país con 4.000 destinos, 2.000 de los cuales perdieron el servicio durante la etapa de concesión privada al grupo Macri. Ahora la situación superavitaria de la empresa permite concretar el proyecto».

Según informó el gremialista, la Comisión Nacional de Comunicaciones habría hecho notar a la gerencia del Correo Argentino la necesidad llevar el servicio a las localidades de la Línea Sur.

«El presidente reconoció que en la Patagonia la deuda social es importante. Nos atendió durante algunos minutos y se comprometió a evaluar la propuesta al tiempo que se sintió identificado con el desamparo al que miles de pobladores en nuestra patagonia se vieron sometidos».

Durante el diálogo que Kirchner mantuvo con los trabajadores del Correo, el presidente aseguró tener «sangre de correo» -su padre trabajó durante gran parte de su vida en la institución- y prometió estudiar detenidamente el proyecto.