Añelo celebra y planifica su futuro

El intendente Darío Díaz trata de pensar lo que viene para tener un crecimiento ordenado, y si lo del crudo afloja demasiado su Plan B es la obra pública.

Algunos dicen que para vivir en Añelo hay que disfrutar las subidas y soportar las bajadas. El pueblo que cambia lento a pesar de estar inmerso en el ritmo acelerado del petróleo hoy festeja 101 años. Entre el rojo que plantean las bardas y el verde de la alfalfa, el pequeño caserío está en pausa pero busca el rumbo para hacerse gigante.

El acto protocolar por los festejos será mañana. Habrá desfile, anuncios de obras y cuando el sol caiga comenzará la fiesta.

Durante dos noches de festival, las escuelas de cultura presentarán cuadros de baile, artistas nacionales cantarán y habrá elección de la reina.

Cuando no hay fiesta Añelo es agua de estanque. El viernes en la plaza había pocas personas, igual que en los comercios. El municipio, de paredes viejas, no reflejaba la bonanza del petróleo y la gente entraba y salía. Al fondo, en la oficina de paredes descascaradas, el intendente Darío Díaz comía su yoghurt de media mañana.

El intendente contó como van las cosas para el pueblo y dijo que el cambio de gobierno y la baja internacional del precio del petróleo frenaron la subida que venía experimentando.

“Las inversiones del boom del petróleo nos exigieron mucho. El crecimiento demográfico, con la falta de infraestructura de un pueblo chico, a ese ritmo nos llevaba al colapso”, dijo y agregó que organizan las cosas con más tiempo para cuando se reactive.

A la siesta, los vecinos disfrutan la tranquilidad de un pueblo en obra por donde se lo mire. Todo en Añelo es a futuro, todo promete y algunas cosas se concretan. Entre las casas humildes, surgen hoteles lujosos, complejos de viviendas o comercios.

Darío Díaz se sube a la camioneta y muestra el Barrio Mirador sobre la barda. Las viviendas del IPVU están en construcción desde principios de 2015 y casi listas para entregar. A su lado, dice que se harán un centro de salud y una iglesia.

Los vecinos saludan al paso y Díaz señala lo que proyecta. “Allá habrá loteos privados, municipales, un nuevo cementerio, conexiones de gas y de luz”, enumeró. Al llegar al lugar en el que hay vagones de subtes contó que el shopping a cielo abierto está en etapa de definición.

Si bien el parate actual permite tomar envión, las complicaciones surgieron en el ámbito laboral y unos 60 desocupados buscan soluciones.

“Cuando la gente no tiene trabajo tiene un problema. Nadie asegura que va a pasar hasta que se reactive, pero buscamos transitarlo con paz social”, dijo el actual jefe comunal.

En este sentido se trabaja con empresas, sindicatos y convocaron a la provincia. Díaz aseguró que su Plan B es la obra pública, y aunque se frenó mucho el que llegaba a probar suerte, cree que el contexto puede traer problemas fuera de los límites de la localidad. “Necesito saber los planes de las ciudades vecinas. Pedí reuniones con los intendentes para conocer el plan de la región, porque no veo que tengan un Plan B. Eso nos va a llevar a conflictos, cortes de ruta y nos va a aislar a nosotros”, concluyó.

“El parate del petróleo es momentáneo. Hay que trabajar para conseguir fondos para infraestructura básica”,

dijo a “Río Negro” el intendente de Añelo, Darío Díaz.

El acto protocolar por el aniversario será mañana. Habrá desfile, anuncios de obras y cuando el sol caiga será el turno para que comience la fiesta.

Datos

“El parate del petróleo es momentáneo. Hay que trabajar para conseguir fondos para infraestructura básica”,
El acto protocolar por el aniversario será mañana. Habrá desfile, anuncios de obras y cuando el sol caiga será el turno para que comience la fiesta.

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