Apuñalaron a un joven y a su perro por venganza 

SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Un grupo de jóvenes acompañados por un hom-bre mayor ingresaron por la fuerza a una casa del barrio Seis Manzanas de Bariloche, donde se domicilia la familia Infante, y apuñalaron a un joven y al perro que los enfrentó.

Los atacantes habrían justificado el desborde por la lesión que sufriera momentos antes una niña vinculada al grupo, presuntamente herida por una piedra arrojada por Diego Infante, de 18 años.

Hubo heridos entre los atacantes y los que defendían la casa, pero «Gringo», el perro de los Infante, recibió tres puñaladas y resultó con las lesiones de mayor gravedad a pesar de su inocencia.

La policía calcula que los hechos se originaron a las 22 del miércoles en Elordi 2.040, en el Alto de la ciudad, cuando una niña recibió una pedrada y los ocupantes de la casa responsabilizaron a Diego Infante. Veinte minutos después, unos quince jóvenes acompañados por un hombre mayor se presentaron en la vivienda ubicada en Felipe Laguna y Pasaje Peatonal, en el barrio Seis Manzanas, exigiendo la presencia de Diego.

La negativa de entregar al muchacho exasperó al violento grupo que instantes después comenzó a destrozar las aberturas de las dos plantas de la vivienda. Los ocupantes apagaron las luces para que uno pudiera escapar para avisar a la policía, pero la casa, con cuatro muchachos y una nena de tres años en el interior, estaba sitiada por los agresores, que entraron en tropel y apuñalaron con saña a «Gringo», el perro que los recibió.

Wálter Infante, de 21 años y hermano de Diego, también recibió un puntazo en el hombro y otro en una pierna, aunque las heridas no fueron graves.

La llegada de la policía impidió que las consecuencias fueran mayores, porque los agresores todavía no habían podido encontrar al muchacho que buscaban.

Miembros del grupo violento resultaron con cortes producidos por los vidrios que habían destrozado, y recibieron atención en el hospital. Infante prefirió atenderse en otro lado para evitar el encuentro, en tanto que un veterinario suturó las heridas del noble animal.

Nancy Infante, hermana de los agredidos, explicó a «Río Negro» que «no sabemos porque lo culparon a Diego, porque a esa hora estaba en la casa. Los atacantes son de la familia Quiñelén y venían con un hombre de unos 50 años. Son muy violentos, siempre crean problemas, y la gente del barrio quiere juntar firmas para expulsarlos», agregó. En el marco de la reciente batalla campal, la mujer comentó que habían logrado esconder a su sobrina de tres años detrás de unos colchones, mientras el esposo de su madre se escapaba para avisar a la policía.

Efectivos de la comisaría 28 investigan el incidente, pero no se produjeron detenciones porque no se denunciaron lesiones de gravedad.