Argibay recién se sumará cuando termine su trabajo en La Haya

BUENOS AIRES (DyN).- La designada jueza de la Corte Suprema de Justicia Carmen Argibay afirmó que el máximo tribunal no necesita esperar su incorporación para definir la causa sobre la pesificación, ya que «si hay mayoría», dijo, puede resolverla sin su presencia.

«Si tienen mayoría no me van a esperar, no necesitan esperarme», dijo Argibay desde Holanda, donde participa en la Corte Internacional de La Haya en una causa sobre la ex Yugoslavia.

De esta manera, la penalista hizo referencia a informaciones periodísticas que durante el fin de semana dieron cuenta de que la Corte Suprema de Justicia aguardaba su incorporación al cuerpo para abordar temas pendientes de tratamiento en el alto tribunal.

En la agenda de prioridades se encuentran un fallo testigo sobre el corte de rutas piquetero, otro sobre la constitucionalidad de las denominadas leyes del olvido, denuncias contra las empresas privatizadas por incumplimientos de contrato, y el ya remanido y demorado caso testigo de la pesificación.

La jueza ratificó que volverá al país y se sumará a la Corte, que entonces ya quedará completa, recién cuando termine su trabajo en la Corte Penal Internacional.

Explicó -en declaraciones a radio Mitre- que si abandonara esa tarea, cuyo plazo de conclusión es «más o menos vago» y podría darse recién a fin de año, estaría dando una imagen negativa y «tiraría a la basura dos años de juicio».

También advirtió que si dejara la Corte Internacional antes de finalizar esa labor «haría que empezaran a mirar a la Argentina como un país irresponsable», aunque aclaró que trata de acelerar esa tarea «lo más posible».

Sostuvo, por otra parte, que «no estaba segura» de que la Cámara alta aprobara su nombramiento, y dijo que «no tenía intranquilidad» al respecto porque su «plan originario» era que cuando terminaba su «caso» en La Haya se volvía a su «casa».

La jueza dijo, en otro orden, que no lo conoce «nada a (el presidente Néstor) Kirchner, más que el día» que le ofreció el cargo. Esa fue la única vez» que lo vio personalmente, señaló.

Apuntó luego que su «regla es hacer todo lo posible, lo mejor posible, y si me equivoco será de buena fe, porque todo el mundo puede equivocarse, pero tratar de hacer las cosas con la mayor seriedad y dedicación posible».

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