Arriaga desplazó a García Lillo de Cultura

CIPOLLETTI (AC) – Jorge García Lillo ya no es el director de Cultura de Cipolletti. El ahora ex funcionario, cuya renuncia fue aceptada por el intendente Julio Arriaga, había recibido fuertes cuestionamientos de parte del mundo artístico y cultural de la ciudad, que llegó a denunciar favoritismos en beneficio de una fundación que integra.

Es el segundo movimiento en la segunda línea del gabinete que hace Arriaga en la semana. La primera había sido la reincorporación de Jorge Hechim en Deportes, tras una suspensión preventiva de casi cien días.

García Lillo le presentó su renuncia al intendente porque, al parecer, fue el propio Arriaga el que así lo pidió.

Hace tiempo que el intendente está disconforme con la gestión del área cultural de su gestión.

Desde el verano pasado que García Lillo venía recibiendo cuestionamientos.

Los primeros en hacerlos públicos fueron los músicos de rock de Cipolletti, que lo acusaron de cercenarles espacios y de discriminarlos.

No fue el detonante, pero fuentes municipales revelaron que en la decisión tuvo fuerte influencia la carta de un lector de «Río Negro» que el sábado acusó a García Lillo de favorecer a la fundación Activart, que integra, en desmedro de otros grupos artísticos de Cipolletti.

La acusación, que no era la primera vez que se hacía pública, señalaba que en la política cultural de la ciudad esta fundación tenía beneficios -como financiamiento de actividades- que brillaban por su ausencia en otras manifestaciones del arte local.

Miembros del gobierno municipal confiaron ayer a este diario que el ex funcionario había recibido de parte de Arriaga un trato no demasiado amable en más de una reunión de gabinete. Inclusive, dijeron que García Lillo se había mostrado dolido por esa consideración.

Se sabe que, aunque tomó él la decisión, al intendente le dolió tener que modificar su esquema de colaboradores y despedir a García Lillo.

La última vez que hizo cambios de importancia en su gabinete fue en el recambio institucional de diciembre, cuando desplazó de la cartera de Gobierno a Alberto Weretilneck, lo nombró en Servicios Públicos y en su lugar colocó a Fabián Gatti, que gracias a la nueva Carta Orgánica no tuvo que renunciar a su banca en el Concejo Deliberante.

Si bien es una dirección y como tal está en la segunda línea del gabinete, el área de Cultura, como Deportes, depende directamente del intendente.