Arriaga: solo y con otro discurso

CIPOLLETTI (AC).- Desafiante, para nada a la defensiva y «convencido de que hice lo que debía hacer» se mostró ayer el diputado Julio Arriaga.

Solo, en la cabecera de la mesa de reuniones de la directiva del Club Cipolletti, ante gran cantidad de periodistas, intentó justificar por qué modificó su postura y votó a favor del proyecto oficialista sobre las retenciones a la soja cuando poco antes había dicho lo contrario.

En este contexto, Arriaga consolidó ayer otro giro, esta vez en su estrategia de comunicación.

El sábado había dicho -comunicado oficial mediante- que su voto obedecía fundamentalmente a la promesa de rebaja en las retenciones a la pera y la manzana, pero ayer priorizó la versión que lo muestra levantando la mano luego de saber que el grueso del oficialismo había aceptado importantes modificaciones que beneficiaban a pequeños y medianos agricultores.

Ocurre que Arriaga estaba quedando en contradicción con el jefe del bloque del FpV, Agustín Rossi, quien durante el fin de semana dio varias entrevistas y nada dijo de una promesa relacionada con la producción valletana cuando le preguntaron por el giro de los diputados rionegrinos.

«Se hizo un esfuerzo grande con modificaciones en soja, además un compromiso concreto con la pera y la manzana, por lo que me pareció absolutamente lógico mi voto», dijo el ex intendente cipoleño.

Luego se le preguntó si después de su votación le había dado, vía telefónica, referencias disímiles a los diversos actores de la actividad frutícola regional. «No, pude haber explicado la argumentación del voto», respondió.

«Para nada» respondió cuando lo interrogaron sobre una posible promesa política, incluso relacionada con su reelección en el 2009, para que cambie el voto.

Y siguió atrincherado en bines de peras y manzanas. «El compromiso de las retenciones a la fruta de la región es tratarlo durante este año», disparó.

Remató reiterando que si en todo este proceso no se hubiera modificado el proyecto original sobre la soja «yo no lo hubiera votado. Cuando cambió, y mucho tuvo que ver el proyecto de Solá, que yo había refrendado, y se me aceptó el tema de la pera de la manzana, voté como lo hice».