Asesinó a su pareja y la enterró en el patio de una vivienda

BUENOS AIRES (Télam)- Una joven fue hallada muerta y enterrada en el patio de una vivienda donde funciona un taller textil, en el partido de San Miguel, y por el crimen fue detenido su pareja, quien estaba a cargo del cuidado de la casa donde se halló el cuerpo.

Voceros de la pesquisa dijeron que el acusado admitió ante la policía haber discutido con su pareja, aparentemente por una infidelidad de ésta, y haber forcejeado, a raíz de lo cual -dijo-, la mujer cayó el suelo, se golpeó, murió y él la enterró.

El episodio remite a otro similar ocurrido en 1998 en González Catán, cuando Mario Frieiro mató a su esposa y la enterró debajo de su cama matrimonial, tras una pelea motivada, entre otras cosas, porque la mujer le era infiel y solía agredirlo verbal y físicamente.

La mujer encontrada enterrada el lunes a la noche en el patio de la casa situada en Agüero 4561, de San Miguel Oeste, fue identificada como Susana Romero (26), quien era buscada por sus familiares desde el 5 de febrero, cuando se presume que se cometió el crimen.

El fiscal de Malvinas Argentinas a cargo del caso, Pablo Roldán, informó que tras la desaparición de Romero una tía de la mujer había radicado un pedido de averiguación de paradero.

Según la policía, todo se inició cuando los dueños del taller textil que funcionaba en la casa de San Miguel, donde trabajaba el concubino de Romero, identificado como Diego Armando Herrera (27), se fueron de vacaciones y dejaron al hombre al cuidado del lugar.

Herrera, dijeron las fuentes, estaba en pareja con Romero y ambos eran padres de un niño, que vivía con ellos, aunque desde hacía tiempo tenían problemas en la relación, aparentemente a raíz de las infidelidades de la mujer.

Pero a los pocos días de que Herrera se mudara por un tiempo a la casa de sus patrones, su mujer desapareció.

El hombre dijo a sus allegados que Romero seguramente lo había abandonado. Pero cuando los dueños de la casa de San Miguel Oeste regresaron de vacaciones, advirtieron algunas cuestiones que le llamaron la atención, entre ella unas bolsas de tierra y unos montículos en el patio, además de unas lesiones en su empleado.

Poco después, revisando el patio, los dueños de casa hallaron en el patio unas falanges de una mano, por lo que de inmediato avisaron a la policía que con ayuda de bomberos y peritos, desenterró un cuerpo.