Atentos a la alcaidía, no cesan los rastrillajes

ROCA (AR).- Los investigadores del robo de 715 kilos de explosivos a la cantera de yeso del norte roquense no descansaron en todo el fin de semana y ayer continuaron con operativos en la zona rural.

Paralelamente, este diario pudo conocer que la alcaidía local permanece bajo estricta vigilancia de la Policía, que no descarta al intento de favorecer una fuga como origen del asalto a los polvorines de la empresa José Cholino e Hijos.

Por su parte, la persona detenida en Allen en el marco de los rastrillajes realizados en toda la región fue liberada durante la mañana de ayer, ya que había sido apresado por averiguación de antecedentes y es imposible mantener a alguien bajo esa condición por un tiempo superior a las 24 horas.

De todas maneras, estaba previsto que la camioneta Dodge en la que circulaba junto a menores de edad por la zona de bardas sea sometida a distintas pericias.

Trascendió de fuentes extraoficiales que el apellido de este hombre de 34 años sería Bombentre. Por su parte, un vocero policial indicó que «su liberación no significa que no existan motivos para seguir teniéndolo en cuenta durante el avance de la investigación».

Cabe recordar que el sujeto nunca fue involucrado formalmente en la causa por la desaparición de los explosivos, pero decidieron detenerlo a partir de dos aspectos particulares, sobre los cuales ayer se conocieron más detalles: además de faltarle dedos de una mano, un familiar suyo residiría en la zona cercana a la cantera de Cholino y otro pariente también padecería la falta de falanges, producto de labores en voladuras de explosivos, tal cual informó una fuente policial.

Por otra parte y siempre de acuerdo a datos aportados por el vocero, cuando los policías interrumpieron su tránsito y sin que antes se lo preguntaran, afirmó: «¿Están buscando los explosivos? A esta altura deben estar muy lejos de acá».

Con respecto a las acciones de las últimas horas, se supo que se avanzó en un análisis sobre diferentes aspectos que involucran a la actividad de extracción de minerales en el Alto Valle. Esto incluyó un trabajo de campo concretado entre la mañana y la tarde de ayer, estableciéndose como meta la obtención de datos relacionados con la producción de los distintos operadores del negocio en la zona.

Esta línea de trabajo se definió durante una reunión realizada en la tarde del sábado entre las distintas fuerzas que intervienen en la pesquisa, en la sede de la Unidad Regional Segunda, en Roca.

Allí se planteó la necesidad de tener un marco de referencia sobre la labor minera, fundamental para el avance o descarte de las hipótesis que se manejan.

Mientras tanto, en todo el Alto Valle persistió ayer la extrema seguridad sobre puntos clave, como el aeropuerto de Neuquén, represas y las cárceles.

En este sentido, la cárcel de encausados de Roca es uno de los edificios sobre los cuales existe mayor recelo por parte de la Policía.

Los sucesivos episodios de violencia interna registrados en las últimas horas pusieron en alerta a los responsables de la unidad, que no descartan ninguna alternativa a la hora de evaluar qué sistema pueden utilizar los detenidos para fugarse.