Bariloche: los choferes no cortarán más boletos

Alfredo Leiva

SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Los trabajadores nucleados en la UTA anunciaron que a partir de mañana no expenderán más boletos a bordo de los colectivos que circulan en la ciudad y responsabilizaron a las empresas por demorar la implementación del nuevo sistema. La desaparición del llamado boleto eventual obligará a los pasajeros a contar con la tarjeta recargable, a no ser que las empresas Codao y Tres de Mayo dispongan una vasta red de kioscos u otros puntos de venta para vende pasajes de papel, en reemplazo de la tarea que hasta ahora realizan los choferes. El cambio ya fue promovido por el municipio, como el 1 de junio como fecha límite para la desaparición del boleto a bordo. Pero luego el ultimátum quedó flexibilizado ante un pedido de las empresas para estudiar con tiempo un nuevo sistema. La UTA decidió en aquel momento que esperaría hasta el 1 de agosto, pero vencido ese plazo aceptó extender la tolerancia debido a “la situación de crisis” que padece la ciudad y también el servicio de transporte. Los boletos eventuales se mantuvieron vigentes, pero la repetición de robos sufridos por los choferes terminó de precipitar las cosas y ayer una asamblea gremial decidió poner fin al manejo de dinero sobre los colectivos. La obligación de terminar con los boletos de papel vendidos a bordo existe desde hace más de diez años pero nunca se terminó de implementar y desde hace largo tiempo ese sistema convive con la tarjeta magnética prepaga. Las empresas prefirieron mantenerlo así porque alegan que de otro modo a los turistas y también a los pasajeros locales que viajan en forma esporádica les resultaría muy dificultoso usar el servicio. Además, las concesionarias se benefician con el precio diferencial ya que los pasajeros que no tienen tarjeta y compran pasaje a bordo pagan un 30% más. Cuando el municipio impuso la eliminación del boleto eventual (luego relativizada) había aclarado que la tarifa pasaría a ser uniforme y rechazó los pedidos de las empresas para disponer un aumento en compensación. Entre las alternativas en estudio ya mencionadas estaría la de vender boletos de papel en los quioscos con una banda magnética que impida su adulteración. Las dos firmas prestadoras habían pedido 120 días para afinar la nueva operatoria. Ahora la decisión de los choferes obligará a acelerar las respuestas. La UTA dijo que la decisión de no “cortar” más boletos se debe a los hechos de violencia sufridos por sus afiliados. Pidieron comprensión de antemano a los pasajeros por los trastornos ocasionados y subrayaron que las empresas “no piensan en sus trabajadores ni en la seguridad, sólo piensan en el dinero”.

Por la medida adoptada por los choferes los usuarios deberán utilizar el sistema de tarjetas para los diferentes recorridos en la ciudad.