Otorgaron 4 meses para investigar las estafas atribuidas a López Giovanelli

Otorgaron 4 meses para investigar las estafas atribuidas a López Giovanelli

Tras una extensa lectura de los 67 hechos de presuntas estafas que la fiscalía atribuye a Madgalena López Giovanelli, la jueza de garantías Romina Martini admitió ayer martes después del mediodía los cargos formulados contra la exagente de venta de paquetes turísticos.

La jueza otorgó 4 meses de plazo a la fiscalía para que haga la investigación preparatoria donde deberá completar las peritaciones pendientes, entre otras medidas de prueba. Martini ordenó además que se mantengan las pautas de conducta impuestas a la imputada, que optó por no declarar en la audiencia de formulación de cargos.

Antes de iniciar la audiencia, el defensor oficial de la acusada Marcelo Álvarez Melinger había solicitado que no esté presente la prensa a pedido de la acusada. Pero la jueza desestimó el pedido porque consideró que los motivos expuestos por el defensor no eran suficientes como para impedir que la audiencia sea pública.

Las fiscales Alejandra Bartolomé y Silvia Paolini, junto al equipo de la Unidad Fiscal, formularon cargos ayer martes a López Giovanelli a la que atribuyeron 56 hechos de estafa, cometidos entre el 2 de mayo de 2016 y los últimos días de abril de 2017 en Bariloche.

De acuerdo a la acusación fiscal, la imputada ofreció en su condición de agente vendedora de viajes turísticos y vendió a los damnificados paquetes turísticos con diversos destinos y fechas a partir de abril de 2017, a cambio de los cuales los denunciantes abonaron diferentes sumas de dinero a través de múltiples medios de pago (en efectivo, mediante tarjetas de crédito y por transferencias bancarias).

Pero la imputada nunca realizó las gestiones conforme lo acordado con sus clientes ni aplicó a los viajes contratados el dinero que le fuera entregado, habiéndole dado otro destino con conocimiento del perjuicio patrimonial que esta maniobra generaría a sus clientes. Los clientes se quedaron sin los paquetes turísticos y no se les devolvió el dinero.

La imputada se valió, según la fiscalía, de dos agencias de viajes, Netsur y Butterfly, en cuya representación actuó, logrando de ese modo darle apariencia de legitimidad a su actividad.

Además la acusaron por otras 11 defraudaciones con tarjetas de crédito. Esos hechos sucedieron entre noviembre de 2016 y el 25 de abril de 2017, cuando utilizó presuntamente los datos de las tarjetas de crédito de algunos de los damnificados para hacer varias compras.

A principios de este año, fuentes judiciales habían informado que el perjuicio ocasionado por las maniobras rondaba los 4,1 millón de pesos. En ese monto se incluyeron alrededor de 3,5 millones de pesos y otros 36.200 dólares. Ayer con la suba del dólar el monto se incrementó a unos 5 millones de pesos.

La defensa de la imputado no cuestionó los cargos formulados y tendrá 4 meses de plazo para trabajar en su teoría del caso.