Bianchi ahora desmintió el ofrecimiento «colchonero»

«En ningún momento hubo un dirigente del Atlético o de otro equipo de España que se conectó conmigo para pedirme mis servicios». Así Carlos Bianchi desactivó lo que hace dos días parecía la bomba de la semana. «Apenas hubo un acercamiento de algunos empresarios cercanos al club madrileño», aclaró ayer el técnico.

La posibilidad de que el ex entrenador de Boca fuera a dirigir a España había empezado a circular en la prensa argentina en base a declaraciones del propio Bianchi.

«No puedo negar que se pusieron en contacto conmigo. El fútbol español me atrae y me gustaría dirigir allí», había comentado al diario «El Mundo Deportivo», de Barcelona, hace unos días.

También, en una nota que le realizó el diario «Marca», de Madrid, el pasado 28 de abril, el «Virrey» había asegurado que «ganas de trabajar, tengo. De eso no hay dudas. Es que extraño los bancos. Al único estadio que voy es al de Vélez. Después no me seduce ir a otra cancha»

Por su parte, el diario deportivo «Olé» aseguró en su edición de ayer que en realidad quienes le consultaron por la posibilidad de ir a España fueron «algunos empresarios vinculados al Atlético de Madrid».

El mismo periódico aseguró que el principal impulsor de la contratación de Bianchi es Miguel Angel Gil Marín, consejero delegado del Atlético de Madrid, pero también sostiene que hay otros candidatos para sentarse en el banco de suplentes del equipo «colchonero» para la próxima temporada, como son el mexicano Javier Aguirre y el español Javier Irureta.

El tema está instalado. Allegados a Bianchi aseguraron también que el entrenador está esperando una oferta concreta. Es más, trascendió que al margen de lo económico el principal punto de discusión sería el de los refuerzos del plantel donde juegan los argentinos Leo Franco y Ariel Ibagaza.

Bianchi ya anticipó que espera, de donde venga el ofrecimiento del exterior, un proyecto con buenas expectativas, algo difícil que ocurra con el Atlético de Madrid, muy complicado en lo económico.