Brasil ganó, pero no mostró mucho

¡Ganó Brasil! Sin jugar el fútbol que hizo historia, venció ayer por 2 a 0 a Perú , logrando su primera victoria en el Grupo «B» de la Copa América que se disputa en Colombia y lo tiene como máximo favorito y bicampeón titular.

Guilherme a los diez minutos abrió la cuenta, mientras que Denilson a los ochenta y cinco aseguró el triunfo de Brasil, que cortó así una inédita racha de cuatro derrotas consecutivas y seis partidos sin victorias.

El triunfo, aunque escaso, representó el primero en la era como técnico del seleccionado brasileño de Luis Felipe Scolari, quien registraba dos derrotas consecutivas en igual cantidad de partidos.

Bajo su conducción, Brasil había perdido por 1 a 0 ante Uruguay en el estadio «Centenario» de Montevideo, el pasado 1 de julio por las Eliminatorias Sudamericanas para el Mundial 2002, y cayó por idéntico resultado frente a México en su debut en la Copa América.

Brasil aprovechó la rápida ventaja, esperó a su rival bien plantado y apostó al contragolpe como única vía de ataque, por medio de la cual consiguió plasmar sobre el final una diferencia más acorde con lo sucedido en el partido.

Perú, que sufrió a los veinte minutos del segundo tiempo la expulsión de Santiago Salazar, por fuerte falta contra Juninho Paulista desde atrás, careció de profundidad. Llegó una sola vez al arco en el primer tiempo con un remate débil y, para colmo de males, mostró las habituales falencias defensivas.

El equipo de Julio César Uribe se reiteró en centros que buscaron la cabeza de Abel Lobatón, su jugador más adelantado hasta que fue reemplazado por Francisco Hernández, y sólo generó cierto peligro con jugadas con pelota detenida, monopolizadas por Jorge Soto.

Después de la expulsión de Salazar, Perú prácticamente no inquietó al arquero Marcos, mientras que Brasil se animó un poco más con los ingresos de Juninho Paulista por Alex y de Denilson por Guilherme y sobre el final consiguió una diferencia más amplia que le permitió mejorar su imagen ante el numeroso público que asistió al estadio «Pascual Guerrero», de Cali.

A los treinta y tres del complemento, Juninho Paulista sacudió el travesaño con un remate cruzado. Siete minutos después, Denilson, en una gran jugada individual, con un remate combado venció al arquero peruano, quien nada pudo hacer.

Con lo exhibido en el final del partido, el seleccionado de Brasil apagó los insultos que comenzaban a escucharse entre el público, se despidió con aplausos y mejoró lo que había mostrado hasta en este torneo, aunque aún lejos está de aquellos equipos que hicieron historia en su rico pasado futbolístico a nivel continental e internacional.

Por lo menos, el triunfo llevará un poco de tranquilidad a la concentración brasileña.

Resultó un espectáculo muy pobre

México y Paraguay empataron anoche 0 a 0 en un pobre partido del Grupo «B» de la Copa América, que mantiene al seleccionado «azteca» como único líder.

Los dos equipos ofrecieron muy poco a los cerca de cuarenta mil espectadores que concurrieron al estadio «Pascual Guerrero» de Cali y que se inclinaron por los mexicanos, pero al final los despidieron con silbidos.

«Aztecas» y «guaraníes», que parecieron conformarse con el empate, brindaron un opaco espectáculo, después de haber tenido una buena presentación en el torneo..

El seleccionado de México se pareció muy poco a aquel equipo que obtuvo hace días un histórico triunfo ante Brasil en el debut en el certamen que se juega en Colombia, mientras que Paraguay mostró más orden en defensa que frente a Perú, pero careció de potencia ofensiva como la que le permitió empatar 3 a 3 sobre la hora en aquella ocasión.

El discreto partido fue arbitrado por el ecuatoriano Roger Zambrano, quien dejó pegar más de la cuenta.

Incluso, debió haber mostrado alguna tarjeta roja ante las faltas descalificadoras de jugadores de ambos equipos que provocaron dos escenas de gresca generalizada, una en cada tiempo.

México cerrará su participación en la ronda inicial ante los peruanos, mientras que Brasil lo hará frente a Paraguay, en una definición que permanecerá abierta hasta la última fecha del Grupo «B», que es el más parejo del certamen por lo observado hasta ahora.