Cada vez hay más software «trucho» en la región

ROCA (AR).- Según la Asociación Civil Software Legal Argentina, 9 de cada 10 computadoras de Río Negro y Neuquén están cargadas de software instalados de forma ilegal. La cifra hace pensar y abre un debate sobre algo que hasta hace poco tiempo era desconocido.

Si no existiera la palabra «piratería» o «copia trucha», pocos sabrían lo que significa «software ilegal» y «violar la propiedad intelectual».

Ya sean grabaciones musicales en MP3 o programas de computación, el auge a partir de las facilidades que otorga Internet hizo que el delito -penado con hasta seis años de prisión- se vuelva una costumbre en la región. Lo nuevo de esta vieja historia es que desde la modificación de la normativa que regula los derechos de autor (Ley 11.723, ahora 25.036) los controles en la Argentina y en la zona aumentaron de manera geométrica. Comenzó así una carrera para bajar el índice de utilización ilegal de programas informáticos en todas las provincias, y de la venta no autorizada de los mismos.

Software Legal Argentina es un asociación sin fines de lucro integrada por Adobe Systems Inc., Autodesk Inc., Bentley Systems Inc., Caldera International Inc., Edusoft S.A., Macromedia Inc.

Por otra parte hay empresas auditoras como Microsoft Corporation, Symantec Corporation, Unisoft SRL y Veritas Software Argentina. Los datos suministrados a este diario hablan de un porcentajes de piratería que llega al 88% en Río Negro y el 87% en Neuquén.

Esto hizo que la Policía de Río Negro comenzara a informarse sobre el tema, porque la cantidad de software «trucho» que circula -además de las copias de viodeocassettes y grabaciones de músicales- es muy grande, según indicaron fuentes de la fuerza.

La problemática es compleja porque «en la región no hay grandes organizaciones que se dediquen a delinquir a manera de asociaciones ilícitas». Sin embargo, los índices de «piratería» son elevados y eso significa que de alguna manera, casi todas las personas que poseen un ordenador, indirectamente no escapan al tema.

La denuncia de estos hechos, que la ley pena como fraude, generó rechazo entre los comerciantes del rubro informático, mucho más cuando la palabra «delito» resultó chocante para calificar una maniobra que es una costumbre entre algunos de ellos: grabar Cds, vender software ilegal, utilizar más licencias por computadora de lo que las empresas otorgan.

«Hasta que no bajen los precios de los programas, la piratería siempre va a existir. Hoy ningún usuario común te compra software, a no ser que sea una empresa», dice un empleado de una casa de computación de la zona.

Pero el delito de falsificar un programa informático y después venderlo al público trae aparejado otra complicación: la evasión de impuestos.

Según informó la AFIP regional, de todas las verificaciones que se realizaron durante este año en las casas de computación se observó que «hay entre un 25 y un 30 % de diferencias que registramos en las fiscalizaciones que obviamente el comerciante después tendrá que pagar». Aunque nadie puede asegurar sobre qué productos las empresas evaden ese tipo de impuestos, Software Legal asegura que como en toda la Argentina esas diferencias en los balances comerciales tienen relación con la «piratería» de productos vendidos a bajo costo.

En este sentido, de los más de 6.000 allanamientos que la Asociación realizó en el país surge que las pérdidas para la industria legal del software rondaron los 192.000.000 de pesos.

Distinguir entre un software legal y uno «trucho» requiere de un peritaje, en caso de que las copias sean casi idénticas. Es un tema relativamente nuevo en Río Negro y Neuquén, lo que movilizó a la Policía a recavar información sobre la materia.

Semanas atrás, representantes de Software Legal ofrecieron una capacitación a efectivos de la Policía rionegrina para que comiencen con los procedimientos y detecten el delito.

«No sabíamos nada. La capacitación fue importante porque es un tema específico y la mayoría de nosotros no conoce demasiado el tema», comentó uno de los efectivos que estuvo presente en la capacitación.

Piratería versus propiedad intelectual

Hay posiciones bien encontradas sobre la aparición de la piratería y la violación de la propiedad intelectual. Una sostiene que la fórmula que expresa «la ley y la cultura se contradicen» se repite en el accionar de algunas personas y eso conforma la costumbre argentina. ¿Para qué vamos a pagar por la licencia de un producto si lo podemos comprar copiado? ¿De qué sirve adquirir los derechos de autor de una música si un CD grabado tiene igual fidelidad?, son preguntas despreocupadas que circulan en la calle del delito que esconde cada una de ellas.

Esto habla de una subestimación del concepto de «propiedad intelectual», del reconocimiento a los creadores de un producto auténtico.

Otra postura, por ejemplo sostiene que la piratería y falsificación de música y software tiene su lógica en los países del tercer mundo que no tienen posibilidades de realizar recambios técnicos en un determinado tiempo porque afirman que los productos originales siguen teniendo un alto costo para el usuario. De hecho, países como Japón y Estados Unidos tiene un bajo índice de piratería, 24 y 37% respectivamente.

Bill Gates, gerente de la macroempresa Microsoft había anticipado un panorama bastante trágico para la propiedad intelectual a partir de que se puso en marcha Internet. En su libro «Camino hacia el futuro» (1995, Mc Graw-Hill) muestra como la «autopista de la información» cambiará el proceso por el cual el autor de una obra original defenderá sus derechos.

«Hay muchísimos otros modos de vender el disfrute de la música o de cualquier otra información. Por ejemplo una canción podría estar disponible en una base pay-per-hearing (pagar para escuchar). Cada vez que la escuchamos se cargará a nuestra cuenta una pequeña cantidad de 5 centavos, por ejemplo. A ese precio escuchar un álbum de 12 canciones costará 60 centavos», comenta el libro. Esto supone la desaparición del formato del CD como venta, y además la articulación de otros modos de resarcir al autor sus derechos sobre la obra original. (AR)

Qué es lo que sanciona la ley

La ley 25.036 fue promulgada el 6 de noviembre de 1998. En la antigua normativa no estaba claro qué tipo de formatos defendía los derechos de autor y propiedad intelectual.

Ahora, el artículo1 -entre otros modificados- quedó redactado de la siguiente manera. «A los efectos de la presente ley, las obras científicas, literarias y artísticas comprenden los escritos de toda naturaleza y extensión, entre ellos los programas de computación fuente y objeto; las compilaciones de datos o de otros materiales; las obras dramáticas, composiciones musicales, dramático-musicales; las cinematográficas….»

Por lo tanto, con la inclusión de las cláusulas informáticas y de video las sanciones que prevé la ley podrán aplicarse si se comprueba que las verificaciones de conductas como:

* Copiar o distribuir software sin haber adquirido las licencias correspondientes.

* Utilizar software en más computadoras de las que autoriza las licencias.

* Préstamo o vender software para que pueda ser copiado por cualquier persona. (AR)

Datos para comprar más seguro

La piratería, en especial de informática, causa problemas a los usuarios poco informados. Muchos son los que compran programas de buena fe y luego aparecen las sorpresas.

La preinstalación de programas en una computadora es uno de los casos. La operación consiste en vender máquinas con el software no original instalado de antemano, sin que el usuario pueda comprobar la autenticidad de los CDs. Ejemplos: sistema operativo Windows en todas sus versiones o programas «utilitarios» como Word, Excel, Photoshop entre otros.

«Algunos comercios no proporcionan los discos originales, ni la documentación y contrato de licencia de usuario final que acompaña a toda copia legítima de un producto», informa Software Legal Argentina.

Sucede que algunas de las copias en CD que fabrican algunos comerciantes «contienen virus» que pueden dañar el sistema de la computadora y perjudicar al usuario en innumerables gastos de reparación y servicio técnico.

En este sentido, es conocida la trampa en la que cae el usuario desinformado cuando detectan problemas con su computadora frecuentemente y deben pagar grandes sumas de dinero.

«Existen varias maneras de falsificar software. Una implica copiar todo el paquete de un producto, de modo que los compradores crean que adquieren un producto legítimo de su fabricante original. El producto completo es una copia, incluida la caja de documentación, los rótulos de los discos, las tarjetas de registro y otras características del embalaje original. En ocasiones, incluso los elementos de seguridad (como hologramas) han sido falsificados con la intención de engañar al cliente y hacerle comprar un producto falso», se informó.

¿Qué cosas es ilegal?:

* Falsificación de software con copias bajo un nombre diferente del original.

* No otorgar al cliente la documentación y licencias de los programas que se instalan.

* CD ROM que no son vendidos en una caja de cartón que incluye el contrato de licencia de usuario final y la tarjeta de registro.

* El formato MP3, el sistema de compresión de audio más popular de internet. Usando el MP3 se venden ilegalmente obras inéditas y compilados de colecciones completas en un sólo CD, sin pagar ningún tipo de derechos por explotar estas obras. (AR)