CAFI se reunió con la AFIP para destrabar 115 millones

En un nuevo intento por destrabar los fondos que el Estado Nacional adeuda al sistema frutícola, por devolución de impuestos y gravámenes sobre la oferta que se exporta, empresarios regionales ligados la actividad se reunieron ayer con el subdirector de Administración Financiera de la AFIP, Juan María Conte, en las oficinas que el organismo nacional tiene en la Capital Federal. En principio, de la reunión iba a participar el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, pero se disculpó a último momento por su ausencia.

Las acreencias de la actividad regional alcanzan ya los 115 millones de pesos. De esta suma, algo más de 12 millones de dólares corresponden a los retrasos por el pago de reintegros mientras que unos 70 millones de pesos son deudas impagas por recupero de IVA.

«Nos aseguraron que en los próximos días se iba a ir regularizando la situación ya que se ha determinado que la fruticultura regional es confiable para la AFIP», señaló el gerente de CAFI, Marcelo Loyarte, al ser consultado por el tema. El funcionario de la cámara frutícola se mostró optimista la salir de la reunión con los técnicos de la AFIP. «Entienden cuál es el problema y se comprometieron a ir regularizando la situación. Es un paso importante», manifestó Loyarte.

Durante los últimos doce meses, la mayor parte de los permisos de embarques de frutas, que estuvieron supeditados al control de la AFIP, fueron objetados como «trámites de opacidad fiscal». Esto significa, tal como se lo señalaron los mismos funcionarios nacionales al ser consultados por el tema, que las exportaciones realizadas por la actividad son «poco transparentes» en materia fiscal y que todas las operaciones pasaron a ser «observadas» por la AFIP, por lo que no se pueden otorgar los «beneficios» de los reintegros y recupero de IVA.

La falta de estos más de 115 millones de pesos, sin dudas genera un fuerte problema de liquidez dentro de la actividad, más aún si se tiene en cuenta que el crédito para la fruticultura es casi inexistente.

De ahí las expectativas del sector en esta última reunión. «Las esperanzas están puestas para que la situación se regularice cuanto antes. En octubre nos daremos cuenta si el gobierno está cumpliendo con su palabra», finalizó Loyarte. (Redacción Central)