Cafiero llamó a garantizar el «nunca más»

En medio de la tormenta desatada por los asesinatos de dos piqueteros la semana pasada en el Puente Pueyrredón de Avellaneda, Juan Pablo Cafiero asumió ayer como ministro de Justicia y Seguridad de la provincia de Buenos Aires y llamó a funcionarios y policías a ser «garantes del «nunca más»».

Por su parte, el gobernador Solá insistió en que no pueden tratarse las protestas sociales como delitos y advirtió que los hombres de su gobierno y muchos funcionarios de la Policía provincial están «llenos de verguenza e indignación» por los crimenes de los piqueteros.

«No hay piqueteros duros y piqueteros blandos, hay gente que protesta. No hay policías duros y policías blandos, no los habrá. Habrá una sola clase de policías, los que cumplan con su deber y con la ley. Que quede claro que este es el compromiso que hacemos hoy desde la vergüenza y el dolor», remarcó Solá en el acto.

Así, el gobierno de Buenos Aires trató de cerrar el capítulo abierto el último miércoles -que en la Justicia está en plena investigación- (ver aparte), cuando los piqueteros Darío Santillán y Maximiliano Kosteki fueron asesinados en la estación de trenes de Avellaneda. Pese a que la Policía lo había negado, imágenes periodísticas demostraron que Santillán fue asesinado por la espalda, presuntamente por uno de los cuatro uniformados que entraron a la estación, quienes se encuentran detenidos. Ayer, el presidente Duhalde decidió no participar del acto que se realizó en la Policía Federal en homenaje a los hombres caídos en cumplimiento del deber.

Casi al mismo tiempo, y con el objetivo de depurar la Policía Bonaerense, Cafiero asumió como ministro de y advirtió que «el poder político y la policía debemos ser los garantes del «nunca más» en la provincia de Buenos Aires», en un llamado a respetar los derechos humanos y la legalidad de los actos que llevan adelante la fuerza.

Por su parte, Solá dijo que en los episodios de Avellaneda «triunfó el matonismo asesino y la creencia de que podía haber una impunidad que hoy la democracia ya no permite…Estamos consternados pero no abatidos -añadió-; creemos saber lo que tenemos que hacer: no salir a nuestra propia caza de brujas dentro de la institución policial. Lo que tenemos que hacer es redoblar el esfuerzo de una conducción, previniendo para no tener que lamentar después», sostuvo.(DyN. Télam)