Califican de autista la política del FMI ante países necesitados

La ministra Miceli disertó en la sede del FMI en Estados Unidos

La ministra de Economía, Felisa Miceli, calificó ayer de «autista» la conducta que el Fondo Monetario Internacional (FMI) tiene para con los países más necesitados de ayuda, y reclamó «un cambio en la estructura de gobierno» del organismo de crédito multilateral.

Miceli disertó en la Decimoquinta Reunión del Comité Monetario y Financiero Internacional, que tiene lugar en la sede del FMI en Washington, en su carácter de presidente del G-24. La titular del Palacio de Hacienda expuso sobre la necesidad de realizar una reforma al régimen de cuotas que otorga el FMI a los países necesitados.

«En el mundo real, el mundo que está fuera de este edificio, los países que más podrían necesitar de la asistencia financiera del Fondo y que, en consecuencia, necesitan poder confiar en obtenerla, se dedican a acumular reservas para autoasegurarse», señaló Miceli.

Además, destacó que «en paralelo, en el Directorio Ejecutivo del FMI nuestros representantes parecen trabajar sobre el supuesto de que el nuevo sistema de cálculo de cuotas terminará pareciéndose mucho al actual; las mismas variables de cálculo pero asignando algo más a algunas economías emergentes a costa de otros países en desarrollo».

«A mi me parece que esto es una conducta autista», concluyó Miceli, quien advirtió que «sería un fracaso que la reforma estratégica terminara siendo algo cosmético que le de más a algunos pocos emergentes que están literalmente tapados de reservas y que muy probablemente ya no necesiten recurrir al Fondo, a costa de otros países en desa

rrollo que tienen aún riesgo de tener que recurrir al Fondo».

En ese sentido, remarcó: «¿Cual sería el mensaje que estaríamos dando? Acumulen reservas ustedes también, lo único confiable es el autoaseguro y los acuerdos regionales, si vienen al Fondo tendrán que pedir acceso excepcional y pagarnos tasas excepcionales y someterse a condicionalidad también excepcional».

«¿Es esto lo que queremos decir? Sería lamentable. A mi me parece, y tal vez me parezca porque no estoy leyendo documentos del Fondo todo el día, que lo primero que deberíamos hacer es considerar cuales serían los cambios en la estructura de gobierno del Fondo que permitan aumentar su eficacia como prestamista de última instancia y como supervisor de nuestras políticas», afirmó Miceli.

A su criterio, es preciso «un Fondo del que nos sintamos dueños», y consideró que es necesario que el organismo «provea de un seguro multilateral confiable, con una asistencia financiera sólida, sin condicionamientos innecesarios y de un costo accesible». (DyN)


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