Carta a Chimpay desde el Vaticano
El papa Francisco también tuvo su lugar de privilegio ayer en el Parque Ceferiniano. Al ir concluyendo la misa central, el obispo de Viedma Esteban Laxague se acercó al púlpito y desde allí informó a los fieles que el sumo pontífice había enviado una carta a los devotos. Inmediatamente hubo aplausos. La misiva, entre sus párrafos más salientes, indicaba “su santidad el papa Francisco saluda especialmente a los peregrinos y devotos que acuden al santuario de Ceferino, en la fiesta de este beato que tuvo el valor de seguir a Cristo sin condiciones en las diversas vicisitudes de su vida. Asimismo, el santo padre los invita a pedir por su intercesión y seguir su ejemplo de entrega a Dios y sus hermanos”. Además hizo extensiva su bendición a la multitud. El papa Francisco, cuando era Arzobispo coadjutor de la diócesis de Buenos Aires, visitó en el 2007 la localidad de Chimpay, cuando se celebró ante una multitud de fieles la ceremonia de beatificación de Ceferino. Muchos devotos esperan que, de ser canonizado el “lirio de la Patagonia”, llegue a estas tierras el propio papa Francisco, quien pudo ver con sus propios ojos el fenómeno que despierta el “indiecito milagroso”. (AVM)
La misiva que envió el papa desde Roma.
El papa Francisco también tuvo su lugar de privilegio ayer en el Parque Ceferiniano. Al ir concluyendo la misa central, el obispo de Viedma Esteban Laxague se acercó al púlpito y desde allí informó a los fieles que el sumo pontífice había enviado una carta a los devotos. Inmediatamente hubo aplausos. La misiva, entre sus párrafos más salientes, indicaba “su santidad el papa Francisco saluda especialmente a los peregrinos y devotos que acuden al santuario de Ceferino, en la fiesta de este beato que tuvo el valor de seguir a Cristo sin condiciones en las diversas vicisitudes de su vida. Asimismo, el santo padre los invita a pedir por su intercesión y seguir su ejemplo de entrega a Dios y sus hermanos”. Además hizo extensiva su bendición a la multitud. El papa Francisco, cuando era Arzobispo coadjutor de la diócesis de Buenos Aires, visitó en el 2007 la localidad de Chimpay, cuando se celebró ante una multitud de fieles la ceremonia de beatificación de Ceferino. Muchos devotos esperan que, de ser canonizado el “lirio de la Patagonia”, llegue a estas tierras el propio papa Francisco, quien pudo ver con sus propios ojos el fenómeno que despierta el “indiecito milagroso”. (AVM)
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