Familia Laz: una vida dedicada a la gastronomía

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Sr. director del diario “Río Negro”:

En nuestra constante búsqueda de testimonios que den cuenta del Neuquén del ayer tuvimos la oportunidad de dialogar con una descendiente de Roberto Laz, su hija Gladys. Nos contó que su padre, Roberto Abel Laz, nacido el 13 de mayo de 1922, era hijo de Juan Maximino Laz (cuyo verdadero apellido era Larsen, de origen dinamarqués, pero en el Registro de las Personas, apenas llegados a la Argentina, anotaron mal su apellido y, como realizar el trámite para rectificar sus datos era muy engorroso en esos tiempos, el apellido quedó plasmado definitivamente así) y de Isabel Merino.

Don Roberto arribó a Plaza Huincul, donde comenzó a trabajar como taxista. Es así que conoció a Ana Irma Almendra, y como ella era menor de edad sus padres no la dejaban salir, entonces el casamiento se concretó rápidamente, tal como era costumbre en la década del 40. Tuvieron dos hijos: Roberto Juan Héctor Laz y Gladys Edith Isabel Laz.

Algunos años más tarde, don Roberto Laz compró un fondo de comercio de restaurante –el rubro gastronómico fue una tentación constante– ubicado en la localidad rionegrina de Cinco Saltos, frente al reconocido galpón de empaque Moño Azul. Instalados en este lugar, le salió la oportunidad de abrir la recordada parrilla de Corrientes y Perito Moreno, en la década del 50, y se vinieron a la ciudad neuquina, donde estuvieron durante veinte años.

Debido a una serie de desacuerdos con el dueño del local, tuvieron que cerrar y el protagonista de nuestra historia y su familia se fueron a vivir a Mar del Plata, donde pusieron también negocio, una pizzería, en calle Independencia al lado del cine San Martín.

Gladys, la hija que nos aporta estos recuerdos, estudió en el Instituto María Auxiliadora de Neuquén (IMA) y fue parte de la primera promoción de egresadas de la escuela secundaria de esa institución. Se casó con Héctor Victoriano Susperreguy, con el que tuvo tres hijos: María Eugenia, Santiago y Sebastián, que residen en Azul, provincia de Buenos Aires. También continúa viviendo en Mar del Plata la esposa de don Laz, siempre bajo los cuidados de su nieto Adrián Laz.

El 22 de abril se cumplen 43 años del fallecimiento de don Roberto, que está vivo en el corazón de su hija: nos dijo “es mi ángel de la guarda”.

Esta es la historia de una familia que los antiguos neuquinos recordamos por el emblemático restaurante y parrilla Laz, ubicado en calle Corrientes y Perito Moreno, en el Bajo neuquino, que fue testigo de la visita de muchos vecinos de aquellas calles de tierra e indomables vientos, que nunca pudieron borrar los recuerdos atesorados en él.

Beatriz Carolina Chávez

DNI 6.251.256

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