Un método para entender la realidad

El método histórico-estructural de Prebisch en la Cepal en los años 40 pone de relieve la importancia del contexto histórico para entender el funcionamiento de la economía y la sociedad. En ese marco se plantea que si bien la ciencia económica y la social deben aspirar a establecer leyes generales también es preciso reconocer que una teoría general encuentra grandes impedimentos para explicar circunstancias históricas en cambio continuo. Por eso cada país tiene que pensarse a si mismo.

Por ser la ciencia económica una ciencia social y tan variables las estructuras económicas y sociales, las posibilidades de idear teorías válidas para todo tiempo y lugar son reducidas.

Por otra parte el método considera un enfoque cercano a lo que podría identificar como la economía política clásica, contexto en que los aspectos sociales y políticos desempeñan un papel determinante para el funcionamiento de la economía, lo que conduce a enfoques que hoy se llamarían interdisciplinarios.

Más aún, el método histórico-estructural parte de la idea de que los propios investigadores son sujetos sociales que abordan el análisis de su realidad con su subjetividad a cuestas, lo que demanda un esfuerzo particular de análisis crítico, formación y debate lúcido.

Cada país tiene que pensarse y reconocerse en su estructura, su sociedad, su economía y su política, especialmente en su tipo de inserción en el mundo en estas áreas, y labrar su futuro con sus propias manos y las de los países de su propia especie.

Las teorías importadas que fijan nuestro lugar en el mundo no reemplazan el pensamiento propio, aunque pueden enriquecerlo o constituir fases.

Alberto Félix Suertegaray

DNI 14.169.481

“Cada país tiene que pensarse y reconocerse en su estructura, su sociedad, su economía y su política, especialmente en su tipo de inserción en el mundo en estas áreas”.

Alberto Félix Suertegaray

DNI 14.169.481