Casa de Piedra, una parada turística que suma vinos de calidad y hortalizas
Con sólo 161 habitantes, la localidad pampeana que conecta con el Alto Valle invita al descanso en las costas de su lago. Crece el desarrollo productivo, en tierras desérticas que ahora cuentan con sistema de riego. Apuntan a una fiesta que potencie su identidad.
postal profunda
En viaje desde Roca por la ruta provincial 6 y luego de cruzar algo más de 100 kilómetros de montes de jarillas, aparece un gran embalse de agua de color verde cristalino que anuncia la llegada a Casa de Piedra. Un sitio que invita al descanso para los que buscan la tranquilidad y armonizarse con la naturaleza.
La localidad, distante a 400 kilómetros de Santa Rosa, se creó de arriba hacia abajo en el 2006. Fue una idea del gobierno provincial para generar un lugar turístico en uno de los escasos espejos de agua que tiene La Pampa.
La preocupante baja del lago en los últimos años obligó a buscar alternativas y surgió el perfil productivo, con vinos de calidad y plantaciones de hortalizas como cebollas y zanahorias.
De sus 161 habitantes, 30 jóvenes estudian en un secundario, 20 chicos van a la primaria y al menos 10 pequeños asisten al jardín. Pese a la escasa población, cuenta con buenos servicios y también hay un hotel, un cuartel de bomberos, un centro médico y un albergue para los visitantes.
El lugar atrapa al viajero para olvidarse del ruido en las grandes ciudades y compartir con los lugareños.
Inversores privados apuestan aquí a la producción de hortalizas y vinos. El Ente Provincial del río Colorado cuenta con una parcela demostrativa de 5 hectáreas. Tiene plantaciones de uva para vinificar y de mesa, olivos, nogales, aromáticas y granadas.
El presidente de la entidad, Enrique Schmidt dijo que experimentan con 10 variedades: una uva blanca Chardonnay y 9 variedades tintas: Malbec, Syrah, Pinot Noir, Petit Verdot, Merlot, Tannat, Bonarda, Cabernet Franc y Sauvignon. En 2015 se obtuvieron 45.000 kg. Desde el ente explicaron que los vinos no están a la venta ya que son pequeñas cantidades y sirven para ver su evolución. Por otro lado tienen sembradas 70 hectáreas de zanahoria, 130 con cebollas y 50 de papa semilla. La empresa encargada de la actividad abastece el consumo local y vende al exterior.
Los cultivos cuentan con una maquina sembradora de cebolla automática que permite regular exactamente la separación entre semillas y el tamaño que tendrá la planta. Esta sembradora facilita rendimiento de siembra de 15 a 17 hectáreas por día.
Alberto Ramón Campo es el delegado Organizador de la comuna y entusiasmado contó a “Río Negro” como se preparan para la fiesta aniversario por los 10 años de Casa de Piedra.
“La idea es que se arraigue en esta comunidad una fiesta que hemos llamado “Vino Joven”, y se va a poder degustar de la cosecha que tuvimos en febrero y marzo de este año”.
Un fogón criollo con artistas y asado para promocionar la carne pampeana esperan ansiosos el 30 de noviembre a los potenciales compradores del vino zonal.
Preparan la fiesta
del “Vino Joven”
Los festejos por los 10 años que cumple Casa de Piedra se realizarán el 30 de noviembre.
Habitantes: 161 habitantes hay en la villa. Tres familias nuevas se sumaron este año.
Aniversario: 10 años cumple la Villa van a festejar con la fiesta del vino.
Sector educativo: 30 adolescentes asisten al secundario de Casa de Piedra, 20 a la primaria y 10 al jardín. De los chicos que terminan la secundaria el 80% continúan su estudios universitarios en San Rosa, Río Negro o Neuquén capital. No hay deserción ni ausentismo en los estudiantes, de acuerdo a los datos brindados por Claudia Ozan, Directora de la escuela primaria 215 de la villa.
Cajero automático: El delegado de la comuna dijo que lo instalarán en poco tiempo. También el puesto caminero y una planta de almacenamiento de gas que permitirá generar energía.
Historia de un amor
de cara al lago
Datos
- Graciela Galindo es dueña del restaurante del pueblo y llegó desde Roca. Su historia está llena de emociones.
- “El amor me trajo a vivir y a trabajar aquí, a los 52 años me tocó el corazón Alberto y apostamos a vivir juntos. Él llevaba 8 años acá” expresó. Graciela cocina junto a su joven ayudante Carla, también roquense. La comida es sabrosa, con ese toque casero que cautiva. Alberto Vico está a cargo del mantenimiento de la villa y llegó de General Pico en 2007 y luego de 4 años conoció a Graciela con quién comparte sus días. “Hemos planeado casarnos en la Villa, frente al lago”, dijo muy ilusionado.
Comentarios