Casas de Sierra Grande con problemas de humedad

SIERRA GRANDE (ASG).- La problemática situación por el anegamiento de varias casas del barrio La Loma de esta ciudad continúa generando inconvenientes. Por ese motivo, los vecinos están preocupados porque temen que sus viviendas sufran serias consecuencias, producto de la constante humedad que padecen desde hace dos meses.

Ayer la municipalidad de Sierra Grande -con el apoyo de ARSA- tomó cartas en el asunto y excavó para dar con el origen de un gran caudal de agua que brota en la zona, pero no hubo novedades.

La situación tomó estado público tras un violento momento vivido en la municipalidad, cuando un vecino damnificado le pegó a un funcionario y a un empleado de la comuna, harto de esperar una solución que nunca llegó. Sólo la presencia del intendente Nelson Iribarren lo calmó.

Esteban Linares, vive en la manzana 10 del barrio La Loma, como otros vecinos del lugar tuvieron que clausurar habitaciones de las viviendas debido a la humedad que brota por las paredes y el piso, debido a un caudal que a simple vista nace en el fondo de su terreno y que con el correr de los días inundó, mojó, colapsó los pozos ciegos y perjudicó la vivienda de al menos 6 familias.

Los reclamos de Linares comenzaron el 27 de marzo y esperó todo este tiempo para que le dieran una solución, pero como no ocurrió tomó a trompadas a un funcionario y un empleado y así se aceleraron los trámites.

Para lograr dar con el origen del problema el municipio y ARSA excavaron sobre la avenida Novillo, una calle que se encuentra un nivel más arriba y donde puede estar el origen del problema. La tarea es ante la sospecha que se trate de una cañería rota. Por la noche las autoridades decidieron cortar el servicio por seguridad, pero el agua continuó brotando y ocasionando los problemas de siempre.

«Se descubrió la totalidad de la cañería para descomprimir la situación de los vecinos, pero hasta aquí no hay fuga en la cañería», sostuvo Lelio Fanelli, responsable regional de Agua Rionegrinas.

Ayer algunos vecinos estuvieron en la obra, entre ellos Linares que opinó que todo sigue igual como hace dos meses, «no estoy conforme, se me va a caer la casa» opinó.

También padece los problemas José Luis Zambrano, un vecino que vive justo frente donde cortaron la calle con las excavaciones.