Caso Messi: la letra chica del contrato tendrá la última palabra

En la interpretación legal de la cláusula de rescisión unilateral del vínculo, está la llave de salida del argentino del Barcelona. Hoy el jugador no se presentó a las pruebas de Covid-19 a las que fue sometido el plantel y tampoco estará mañana en el primer día de entrenamiento del ciclo de Koeman.

El divorcio se consuma. Lionel Messi, que anunció el martes pasado a la directiva su intención de salir del Barcelona, no acudió hoy al centro de entrenamiento donde los jugadores estaban citados para someterse a una prueba de Covid-19 y tampoco estará mañana en el primer día de entrenamiento a cargo del flamante DT Ronald Koeman.


Messi es el que está dispuesto a romper esta relación de 20 años pero quiere que el divorcio sea en buenos términos y no le gustaría salir por la puerta de atrás, luego de su larguísima y exitosa trayectoria deportiva con el Barça.
El argentino desea negociar las condiciones de su salida, mientras que el presidente, Josep María Bartomeu, está dispuesto a poner en la balanza su dimisión si Messi se compromete públicamente a quedarse, según la prensa. El club quiere que la situación no se siga envenenando, aunque parece inevitable una batalla jurídica alrededor de la cláusula N° 24 del contrato del jugador, donde dice que podría romper el vínculo de manera unilateral al final de temporada.

En las últimas horas se viralizó un video que data de septiembre del año pasado donde Bartomeu ratifica que el jugador podía irse si lo deseara. Pero aquí las partes quieren hacer validar dos líneas del contrato con distintas interpretaciones.
Según el Barcelona Messi tenía tiempo de hacer valer la cláusula hasta el 10 de junio y por eso dicen que no tiene validez el burofax que emitió el martes pasado.
Sin embargo los letrados que asesoran al crack sostienen que la FIFA sacó un comunicado en abril diciendo que, a raíz de la pandemia, los ciclos deportivos no finalizarían en término y que el vencimiento de los vínculos de los jugadores se prorrogaban hasta la finalización de la temporada. Es decir que año deportivo del período 2019-20 terminó con la final de la Champions League.

Así las cosas, el Barcelona, que cuenta con el apoyo de la Liga española, sostiene que la petición de Messi está hecha fuera de término (más allá del 10 de junio), mientras que los abogados del jugador afirman el burofax se envió al “final de la temporada”, tal como supuestamente figuraría en el contrato de Messi.

¿Qué sería irse en buenos términos del Barsa para el crack? No irse gratis sin dejar un euro a la entidad culé, pero que a la vez acepte venderlo al Manchester City tal como se especula.
Mientras los pedidos de renuncia se suman en su contra, Bartomeu resiste e intenta por todos los medios retener a Messi aunque prefiere embarrar la cancha antes que ver al ídolo y capitán culé con otra camiseta.


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