Caso Zerdán: críticas al procesamiento

ROCA (AR).- El abogado de la pareja de la bioquímica cipoleña Ana Zerdán, consideró que el procesamiento de su cliente no tiene fundamentos que apoyen la decisión de que Juan Carlos Aguirre continúe en prisión como autor del crimen de la profesional de Cipolletti.

Entre otras cosas, consideró como “dudosa” a la pericia de Gendarmería, por la que salta a la luz una huella de Aguirre en la tapa del depósito del inodoro, elemento con que asesinaron a Zerdán. También consideró como un “disparate”, que la codicia del imputado haya sido el móvil del crimen.

Eves Tejeda puso en duda la pericia, ya que su juicio, cuando en un primer momento personal de Criminología de la Policía de Río Negro analizó la tapa en cuestión, “resaltó que era imposible identificar huellas humanas. Sin embargo, un año después, el gabinete de Gendarmería concluyó que la huella pertenece a Aguirre, a la vez que informa que se trizó el soporte de vidrio de la misma, impidiendo una tercera pericia como corresponde”.

Tejeda también criticó el resultado del examen, donde la huella de Aguirre aparecería manchada con sangre. “Si hubiera ocurrido de esa manera, sería poco menos que imposible que haya quedado alguna huella, ya que la viscosidad de la sangre lo hubiera impedido”.

Otras de las observaciones que realizó el defensor es que no está claramente descripto en qué lugar de la tapa estaba la huella de Aguirre. “Esto es de suma importancia, ya que se podría determinar si la huella quedó impresa cuando se levantó la tapa para golpear a la víctima”, señaló.

Con respecto a la codicia que argumentó el juez, el abogado lo relativizó. “El magistrado hace un ensayo de dialéctica para tratar de convencernos de un móvil que no tiene asidero, ya que no se ha podido acreditar con prueba alguna. Sólo se trata de una conclusión subjetiva del juez”, dijo.

“Con ese criterio, en vez de invocarse la codicia, podría haber dicho que el móvil del hecho era la infidelidad, los celos, etc.”, prosiguió.

Juan Carlos Aguirre fue durante diez años la pareja de la bioquímica Ana Zerdán, asesinada en setiembre del ‘99 en su laboratorio. En diciembre pasado fue detenido junto a su hijo Juan Manual Aguirre Taboada, luego de la llegada de los resultados de las pericias de Gendarmería.

Sin embargo, el viernes al mediodía, el muchacho recuperó su libertad al dictarse la falta de méritos, mientras que su padre fue procesado y es el único detenido hasta el momento por el asesinato de la mujer.