Castro aumenta su control de la economía cubana

LA HABANA (AFP) – El presidente cubano Fidel Castro anunció una revaluación de 8% del peso convertible frente al dólar y otras divisas extranjeras, como parte del «contragolpe económico y social de la revolución», frente a los intentos estadounidenses de asfixiarla.

La medida se produce una semana después de que se concretara también una revaluación del peso cubano, la otra moneda que circula en la nación caribeña y en medio de una profunda transformación financiera para retomar el control de su economía.

La paridad uno a uno del peso convertible con el dólar, mantenida desde la creación de la divisa interna cubana en 1994 «es artificial y no refleja una relación real de valor entre ambas monedas», dijo Castro la noche del jueves, al leer un acuerdo del Comité de Política Monetaria del Banco Central. En una «intervención especial», la segunda en seis días, Castro añadió que esa relación artificial entre ambas monedas «crea un efecto distorsionador en la formulación de una sana política monetaria» nacional.

Desde el 20 de octubre pasado, cuando Cuba suspendió la libre circulación interna del dólar, en el país quedaron dos monedas en uso, el peso cubano, en el que perciben su salario los trabajadores y con el cual pagan los servicios básicos, y el peso convertible, resultado del canje de las divisas extranjeras que entran al país a través de remesas familiares y otras vías.

El viernes 18, en otro anuncio similar, Castro había revaluado el peso cubano frente al dólar y al peso convertible en un 7%, modificando la tasa de 26 a 24 pesos por un dólar.

El mandatario explicó que estas medidas monetarias y otras de carácter económico que se están aplicando, constituyen «un contragolpe económico y social de la revolución cubana frente a los planes de asfixia económica» de Estados Unidos.

Señaló que la continua devaluación del dólar en los últimos años es el «método de saqueo» del orden económico vigente, «contra lo cual proclamamos nuestro derecho a sublevarnos».

Al romper la paridad con el dólar, el peso convertible también se revalúa frente a otras divisas extranjeras, por lo cual el Banco Central dio hasta el 9 de abril próximo para que las personas que poseen efectivo de esas monedas, puedan abrir cuentas.

Castro dio «absoluta garantía» a quienes tienen cuentas bancarias en divisa de que sus ahorros no se verán devaluados.

Pero el anuncio, realizado ante una cadena de radio y televisión, dejó muchas dudas e interrogantes entre la población, a pesar de los esfuerzos del mandatario por transmitir confianza y seguridad. «Nadie se asuste, que el valor alcanzado por nuestro pesito se mantendrá en su totalidad», dijo Castro. No obstante, los medios locales anunciaron una emisión del programa radiotelevisivo Mesa Redonda dedicado al tema, donde directivos y especialistas del Banco Central van a «profundizar y esclarecer elementos de esta trascendental decisión».

Los grandes afectados con esta medida son los cubanos que reciben remesas familiares de los Estados Unidos, dado que ahora obtendrán casi un 20% menos de pesos cubanos convertibles por sus dólares. Los familiares que viven en Estados Unidos se ven obligados además a pagar otro 20% a las agencias o a las mulas que transportan la ayuda debido a las restricciones impuestas por Washington.

Instituida en 1994, la paridad con el peso convertible se fijó en 1994, cuando medio de una crisis producto de la caída de sus aliados socialistas y de un reforzamiento del embargo estadounidense, Cuba debió dolarizar su economía y tomar medidas aperturistas. La semana pasada Castro había anunciado una revaluación del 7% de su peso cubano en relación al convertible (de 27 cubanos por uno convertible a 24 cubanos por uno convertible). En noviembre las autoridades ya habían dispuesto el reemplazo del dólar por pesos convertibles en su mercado interno, aunque lo mantuvo como billete bancario y se permitían las transacciones en moneda estadounidense de interés para las empresas extranjeras.

«Cada vez me siento más atraído por las ideas de Marx, Engels y Lenin», dijo Castro, en una reafirmación de su ideología comunista.