Chico herido tras caer desde el cielo raso dentro de un colegio

Fue el domingo en el CPEM 44 de Ciudad Industrial.

Gabriel Oyarzo

Paneles del cielo raso fueron hallados por los docentes que llegaron tras el incidente. También había manchas de sangre.

NEUQUÉN (AN).- Un chico de trece años permanece internado a raíz de las lesiones que recibió cuando junto a otros dos adolescentes ingresó en un colegio secundario de Ciudad Industrial aparentemente con intenciones de sustraer o utilizar las computadoras del lugar y el cielo raso por el que se escabullía, sucumbió. El incidente tuvo lugar el domingo pasadas las 9 de la noche en el CPEM 44 del barrio de la meseta y fue rápidamente atendido dado que el establecimiento cuenta con un sistema de alarmas. “Cuando llegaron algunos docentes que fueron advertidos se encontraron con una escena muy rara porque había paneles del cielo raso en el piso, muchas manchas de sangre y más adelante había vómito”, relató el director del colegio, Gabriel Pillado. De inmediato una vecina se acercó al colegio, en donde permanecía la policía constatando que nada faltaba del lugar, y le manifestó a los docentes que su hijo había llegado a casa lesionado y asustado y que ella creía que había estado en el colegio. “El chico fue llevado al hospital y por lo que contó estaba con otros dos adolescentes cuando se rompió el cielo raso y aparentemente fue producto del golpe que convulsionó y por eso vomitó”, indicó Pillado. De acuerdo a los relevamientos realizados los menores ingresaron al colegio forzando una pequeña ventana y al encontrarse con que la puerta del aula a la que ingresaron estaba cerrada, optaron por trasladarse hasta la sala de informática por el techo. “No estamos seguros de si quisieron robar o simplemente usar las computadoras pero lo cierto es que llegaron a la sala de informática”, señaló Pillado y reclamó que “necesitamos que desde el Consejo Provincial de Educación dispongan un custodio para las noches y fines de semana porque este es el tercer episodio que afecta al colegio desde diciembre pasado”. El directivo detalló que “como ningún docente vive en el barrio siempre tardamos veinte minutos en llegar al colegio, una vez que nos avisan que se disparó la alarma y en ese tiempo es que nos han robado casi todas las cosas de electrónica”.


Gabriel Oyarzo

Registrate gratis

Disfrutá de nuestros contenidos y entretenimiento

Suscribite por $1500 ¿Ya estás suscripto? Ingresá ahora
Certificado según norma CWA 17493
Journalism Trust Initiative
Nuestras directrices editoriales
<span>Certificado según norma CWA 17493 <br><strong>Journalism Trust Initiative</strong></span>

Comentarios