Chiítas muestran su poder y exigen elecciones en Irak

BAGDAD (AP). -Decenas de miles de chiítas se manifestaron ayer pacíficamente en la capital para pedir elecciones gubernamentales por sufragio universal, mientras la ONU anunció que una misión estudiará la viabilidad de celebrar en los próximos meses elecciones directas para un gobierno provisional en Irak.

La de ayer fue la mayor exhibición de poderío político chiíta en Bagdad desde el colapso de la dictadura de Saddam Hussein en abril, justo cuando el secretario general de la ONU, Kofi Annan, se reunía con el administrador estadounidense en Irak, Paul Bremer, para plantearle una misión «mediadora» del organismo internacional que respalde la transición política en ese país.

La ONU, que hace unos meses retiró a todo su personal internacional con el primer atentado de consideración que sufrió la sede de las Naciones Unidas en la capital iraquí, se mostró renuente a desempeñar un cometido mayor en Irak hasta que Washington le conceda mayores poderes y hasta que los aliados garanticen la seguridad de sus empleados.

La marcha se produjo también un día después que 31 personas murieron y unas 130 heridas cuando un atacante suicida detonó su camión a la entrada de la sede central en Bagdad de la autoridad de ocupación, afectando la credibilidad estadounidense.

Unos 100.000 chiítas, según los medios informativos, marcharon unos 5 kilómetros hasta la Universidad de al-Mustansariya, donde un representante del gran ayatollah Alí al-Husseini al-Sistani dijo que sus pedidos iban dirigidos a Annan, la autoridad de ocupación estadounidense y sus aliados iraquíes.

Al-Sistani, el líder chiíta más influyente del país, rechazó la fórmula estadounidense de transferir el poder a una legislatura provisional elegida en 18 consejos regionales, pidiendo en su lugar el sufragio universal y directo.

Según el plan de EE.UU., la legislatura debe designar un gobierno de transición, que recibir el poder de la coalición administrativa encabezada por Estados Unidos, el primero de julio antes de que tengan lugar las elecciones directas en el 2005.

«Los hijos del pueblo iraquí demandan un sistema político basado en elecciones directas y una constitución que imparta justicia e igualdad para todos'', dijo a la multitud el representante de al-Sistani, Hashem al-Awad. «Cualquier otra alternativa hará que la gente tome la situación en sus manos''. Los asistentes corearon al unísono «Sí, sí a elecciones. No, no a la ocupación''.

Pero el secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan, rechazó ayer un regreso inmediato a Irak y agregó que son necesarios más elementos técnicos antes de resolver el envío de una misión para analizar si existen las condiciones para celebrar elecciones. Annan, dijo hoy que el plan de transferencia de la soberanía iraquí propuesto por Estados Unidos debe ser mejorado.

«La pregunta es si están dadas las condiciones técnicas, políticas y de seguridad para realizar como temprano en mayo de este año elecciones generales directas».

Matan a 11 civiles afganos en bombardeo

KABUL (Télam-AP).- Once civiles murieron ayer por un bombardeo estadounidense en la provincia afgana de Oruzgan, entre ellos cuatro niños, informó ayer el gobernador Jan Mohammad Khan. «Eran simples aldeanos, no eran talibanes. No sé por qué Estados Unidos bombardeó este hogar. Hemos informado a nuestras autoridades», indicó a la prensa el jefe del distrito de Cha Chinow, Abdul Rahman. El gobernador Khan dijo que entre las per

sonas atacadas había cuatro niños y tres mujeres e indicó que el ataque ocurrió en la aldea de Saranaw, en la región centro sur de Afganistán, en la mañana de ayer domingo.

El sábado las tropas norteamericanas acompañadas por milicias antitalibán afganas, penetraron en el distrito de Cha Chinow para realizar un rastrillaje precisamente en la aldea atacada ayer por aviones norteamericanos. Khan dijo a la AP que autoridades estadounidenses le habían dicho que localizaron municiones durante el allanamiento . Y eso, al parecer, causó sospechas. Durante la investigación, «la gente se asustó y comenzó a correr'', dijo Jan. «Los estadounidenses bombardearon la vivienda'', indicó.

En tanto, también el domingo en Oruzgan fue perpetrado un ataque talibán contra la base militar estadounidense de Deh Rawood. Oruzgan fue uno de los principales feudos del régimen talibán, derrocado en 2001 por la coalición internacional encabezada por Estados Unidos.

Análisis: El ayatollah silencioso que preocupa a EE. UU.

El ayatollah silencioso que preocupa a EE. UU.

El gran ayatollah Ali Hussein al Sistani no se relaciona con el Consejo de Gobierno provisional en Bagdad. Hasta la fecha ha rechazado reunirse con el administrador civil de Irak, el estadounidense Paul Bremer. El religioso, de 73 años, luce una larga barba blanca. Prefiere la habitación sin muebles de su casa en Nayaf, donde analiza cuestiones teológicas.

Sin embargo, Sistani es, por su posición como líder del clero chiíta y por su fama de religioso incorruptible y recto, más poderoso que la mayoría de los políticos iraquíes que actualmente comparten el poder con los estadounidenses.

Muchos de los más del 60% de chiítas en el país están dispuestos a acatar los dictámenes islámicos de al Sistani. Tras el derrocamiento del régimen de Saddam Hussein, instó a sus correligionarios a no participar en la resistencia armada contra EE.UU. Su llamado fue respetado.

También parece que tiene efecto su tenaz protesta contra la fuerza ocupante por el proceso del Consejo de Gobierno iraquí para el nombramiento de un Consejo Nacional provisional en junio próximo. Miles salieron a la calle en Basora y Bagdad para exigir que, en lugar de nombrar un consejo, se celebren elecciones generales.

Con ello, este hombre calmado quiere asegurar que la nueva cúpula gubernamental responderá a la composición de la población, de mayoría chiíta, así como el carácter islámico de la sociedad iraquí.

Al Sistani nació en 1930 en la localidad iraní de Mayad. Desciende de una familia de renombrados religiosos. El régimen de Saddam Hussein estaba dominado por sunnitas, que trataron a los chiítas como ciudadanos de segunda clase y mató a muchos de sus líderes religiosos. El propio Ali al Sistani vivió varios años en Nayaf bajo arresto domiciliario.

Actualmente tampoco sale demasiado de casa. No es un radical: esté a favor de separar el Estado de la religión y no aspira a un Estado teocrático según el modelo iraní, pero tampoco quiere mantenerse fuera del todo de la política.