Cinematográfica persecución en Cipolletti

CIPOLLETTI (AC)- Las dotaciones de tres patrulleros, y motoristas de la policía cipoleña protagonizaron el domingo, alrededor de las 23.15, una cinematográfica persecución por calles céntricas y luego barriales de un conductor. El hombre se movilizaba en un Fiat Duna color blanco, en estado de excitación -pudo haber sido por exceso de ingesta alcohólica- quien minutos antes había puesto en riesgo, por alta velocidad, la vida de al menos dos personas y atropellando incluso a un muchacho que iba en su moto, sin consecuencias graves.

En una primera intersección los policías lo apuntaron con Itakas para controlarlo, pero el hombre volvió a fugarse, por lo que los efectivos debieron efectuar algunos disparos intimidatorios que no surtieron efecto alguno.

Peor aún, porque cuando el hombre en su alocado raid llegó a su domicilio del barrio Anai Mapu, en la frontera urbana norte del ejido, la emprendió a piedrazos contra los policías, ayudado por algunos amigos que concurrieron en su apoyo, aunque tras varias escaramuzas y no poca tensión resultó detenido y anoche se hallaba alojado en un calabozo de la Comisaría Cuarta.

Todo comenzó poco antes de las 23, cuando se recibió en la comisaría la advertencia de una señora mayor sobre que un auto Duna blanco casi la atropella, en calle Roca, en cercanías de la plaza San Martín. Paralelamente entró otra llamada dando cuenta de que un auto de similares características se había llevado por delante una moto con su conductor a cuestas en la calle Roca, pasando España.

Se ubicó al exaltado conductor casi de inmediato, porque todo acontecía en pleno centro, y se lanzó la persecución. El hombre, con acelerador a fondo, dobló por Villegas, tomó Yrigoyen y se detuvo, aparentemente para pasar desapercibido, unos 20 metros antes de la intersección con España.

Empero, la policía se percató de la maniobra, y efectivos bajaron con Itakas y le apuntaron, para que deje el rodado y se entregue.

Sin amilanarse, pegó una fuerte acelerada y arrancó de nuevo, con los policías detrás y por uno de los costados, conmocionando la zona. La corrida continuó por Brentana, Alem, La Esmeralda, Circunvalación y el barrio Mapu.

Allí, aparentemente en su domicilio, el hombre se bajó y en un gesto que sorprendió a los policías entró a la casa pero salió muy rápido y la emprendió a los piedrazos contra los uniformados, generándose momentos de muy alta tensión, ya que hubo gente que salió en su ayuda y también atacó a la policía.

Luego de escaramuzas, forcejeos y un acordonamiento de toda el área y con policías de refuerzo llegados desde otras unidades, el hombre resultó detenido y los demás, controlados.

Se instruye una causa por presuntas lesiones y resistencia a la autoridad, mientras que por otro carril, en el Juzgado de Faltas Municipal, están las actuaciones por el manejo presuntamente con exceso etílico.