Desde Tucumán al hospital cipoleño: “De acá no me sacan nunca más”

Mirta Carrizo es licenciada en Enfermería y llegó de Tucumán con su familia para trabajar. En su primer viaje conoció el mar y, al pasar por el Valle, el aroma a frutas de las chacras y el encanto de la ciudad la terminaron de convencer para quedarse.

En Cipolletti encontró su lugar en el mundo. El que buscó cuando dejó su Tucumán natal y se animó a emprender un largo viaje para buscar un futuro mejor para su familia.

Mirta Carrizo (49) recorre los pasillos del hospital Pedro Moguillansky cada día de trabajo. Es una de las tantas mujeres que ponen lo mejor de sí para que la Salud Pública se pueda sostener.

Se formó como Licenciada en Enfermería en la Universidad Nacional de Tucumán y en el 2007 tomó una decisión que marcó su vida para siempre: la de dejar su terruño y los afectos y encontrar nuevos horizontes.

La idea de mudarse al sur con su marido y su hija, que por ese entonces era pequeña, daba vueltas en la familia, pero cuál sería el destino para empezar a transitar un nuevo proyecto de vida, era el dilema a resolver. “Para el norteño, hablar del sur es pensar en Ushuaia. Mi esposo por ese entonces era camionero, viajó a Cipolletti, vio cómo estaba la ciudad y me contó por teléfono”, recordó Mirta.

Pero para conocer y tomar una determinación tan importante como la de echar raíces en otro lugar, había que viajar. Entonces, en un flete que su marido debía realizar al Puerto de San Antonio, Mirta se subió al camión y lo acompañó.

Una enamorada del Valle

El viaje le provocó una experiencia inolvidable. Conoció el mar por primera vez y cuando atravesó el Valle, sintió el aroma a fruta de las chacras y el encanto de la producción combinada con la ciudad definitivamente la atrapó. “Me gustó todo y cuando nos vinimos me dije: de acá no me sacan nunca más”, contó.

En Cipolletti, Mirta y su familia encontraron un suelo fértil para crecer, siempre en base al esfuerzo y al sacrificio. Ni bien llegaron de Tucumán, el hospital le abrió las puertas para comenzar a trabajar en lo suyo. “Yo vi el fruto de nuestro esfuerzo, traducido en progreso. Progreso que quizás allá, en Tucumán, no hubiéramos tenido. Los sueldos allá son muy bajos. Acá es cuestión de sacrificarse un poco más en nuestra profesión y hay un plus. Hace un año que tenemos nuestra vivienda propia”, señaló.

Mirta dice que es una agradecida al trabajo que la acogió, al tipo de vida que puede llevar en Cipolletti y a las relaciones sociales que construyó. “Cipolletti me brindó muchas cosas. Se extrañan los amigos, la familia y la comida. Pero siempre estamos pegando un toque de vuelta como visita a Tucumán”, agregó.

Desde que ingresó al hospital Mirta trabajó durante 9 años en el área de Clínica Médica y hace unos meses que se desempeña en Ginecología, como enfermera asistencial y con trato directo con el paciente. “Es lo que prefiero y lo que más me gusta, el contacto con los pacientes. No me interesan los cargos jerárquicos”, afirmó.

Para Mirta Cipolletti debe seguir creciendo, de manera ordenada, y priorizando una característica que destaca cuando habla de la ciudad que adoptó: la limpieza. Pero cree que más allá de al responsabilidad que le compete al Estado, existe otra tan o más importante que es la de todos los ciudadanos, que deben mantener limpias las calles de la cuidad para que sea vea mejor.

Y cuando se acuerda de lo que la conquistó cuando visitó el Valle por primera vez y mira hacia la urbanización que sigue avanzando hacia las zonas rurales casi en extinción de Cipolletti, desea que “no se pierda eso tan lindo que tenía esta ciudad, eso que nos impactó cuando llegamos, de estar en medio del entorno de las chacras, poder salir a caminar y sentir la frescura de los frutales”.

¿Sabías que?…

Datos

Desde que ingresó al hospital, Mirta estuvo nueve años en Clínica Médica y hace unos meses se desempeña en Ginecología, como enfermera asistencial.
El hospital se inauguró en octubre del 2015 y comenzó a funcionar un año después.
“Cipolletti me brindó muchas cosas. Se extrañan los amigos, la familia… Pero siempre estamos pegando un toque de vuelta como visita a Tucumán”,
comentó Mirta Carrizo.

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