Clara opción por la mano dura

El Perú optó ayer por dejar en segunda vuelta al nacionalista Ollanta Humala y a la derechista Keiko Fujimori, los dos candidatos a los que los rivales definen como representantes del autoritarismo y la antidemocracia. Todos los conteos extraoficiales apuntan a que Humala y Fujimori pondrán a los peruanos a definir el 5 de junio entre dos modelos que generan temores por diferentes razones. El líder nacionalista genera temores por su supuesto parecido ideológico con el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, impopular en Perú. Sus adversarios aseguran que buscará perpetuarse en el poder, atropellar a la oposición e imponer un sistema económico populista . Humala ha marcado distancias con Chávez y ha tratado de deslindar con el revolucionario que representaba él mismo hace cinco años. Ahora afirma que los cambios se harán bajo un respeto irrestricto a los principios democráticos . Su virtual adversaria, por su parte, es una reivindicadora del gobierno de su padre, el hoy encarcelado ex presidente Alberto Fujimori, caracterizado por un récord negativo en derechos humanos y corrupción. Keiko defiende políticas de mano dura contra la inseguridad, incluida la pena de muerte para violadores de niños. Pese a esos antecedentes, los dos candidatos lograron ser los más atractivos en una campaña fragmentada e ideológicamente pobre. Humala supo interpretar el malestar de sectores populares con el modelo económico, mientras que Fujimori aprovechó la base social heredada de su progenitor. Las autoproclamadas fuerzas democráticas no pudieron ponerse de acuerdo y se dividieron en tres propuestas. Y la fragmentación le permitió el paso a segunda vuelta a Fujimori . La segunda vuelta se vislumbra de pronóstico reservado. Los dos postulantes no solo tienen su base de apoyo en los mismos sectores sociales: los más pobres. Además, tienen las mayores resistencias en las clases medias. Sin embargo, Humala tiene una ventaja: ganó la primera vuelta con una diferencia holgada. Además, su crecimiento de las últimas semanas podría demostrar que tiene mayor capacidad de expansión que Fujimori. (DPA)

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