¿Cómo votarán los diputados de la región?

Eso les preguntó “Río Negro” a los que se animaron a anticipar sus puntos de vista sobre la reforma judicial. Los radicales Castañón y Yagüe dijeron que votarán en contra. El emepenista Brillo también se manifestó crítico con el proyecto. Sus compañeros cavilan.

De los diez, cinco clavan tacos a Cristina, dos se oponen, uno es crítico pero no definió qué hará y otros dos pispean el camino a seguir.

Así se distribuía anoche la correlación de fuerzas que cosecha el gobierno nacional entre los diputados nacionales de Río Negro y Neuquén en relación a la reforma de la Justicia, tres de cuyos proyectos –los menos conflictivos– ya trató ayer la cámara baja: los accesos por concurso público, la publicación “on–line” de los fallos y la declaración patrimonial de los funcionarios judiciales.

Al mediodía, los representantes del Movimiento Popular Neuquino se encuadraron en apoyo a los tres proyectos citados. Pero no es seguro que sigan el mismo criterio la próxima semana cuando tengan que tratar la limitación de las cautelares y la elección de miembros del Consejo de la Magistratura, teniendo en cuenta que por lo menos uno de ellos –José Brillo– se expresó crítico del proyecto exprés y a libro cerrado.

De las consultas realizadas por “Río Negro”, se desprende que asumen una verticalidad terminante acrítica a la iniciativa los kirchneristas rionegrinos Oscar Albrieu, Jorge Cejas, Silvina García Larraburu, todos de madera peronistas. Se suma a ellos, Herman Avoscan, que ajeno al justicialismo encontró su destino político en ser fiel espadachín del gobernador provincial Alberto Weretilneck (Frente Grande)

Estos cuatro votos son reforzados por el kirchnerista neuquino Alberto Ciampini. Según confesó a este diario, su posición fue monitoreada por el verborrágico senador kirchnerista Marcelo Fuentes, quien lo enfiló a la obediencia sin más. “Hablamos mucho, hay que eliminar el conservadurismo que es propio de la corporación de abogados”, dijo.

Albrieu, por su parte, razona el tema no desde sus propia experiencia como hombre de derecho y ex juez federal, sino como un eslabón más en la cadena de obediencia a Cristina.

– Hay que quitarle tremendismo al tema – dice. Y acota: “El Poder Judicial necesita cambios, erradicar algunos bolsones de mentalidad conservadora, patriarcal. En relación a las cautelares hay mucha sobreactuación de los jueces”. Pero a pesar de esta cohesión que muestra el planeta K en Río Negro y Neuquén, algunos de estos legisladores se reservan dudas sobre el conjunto de iniciativas que hacen a le mentada “democratización de la justicia”. Así, uno de ellos se sinceró. “El único tema que me pregunto es cómo mierda hacemos para votar en una lista peronistas a tipos que después tendrán que tener mucho equilibrio para definir quiénes van al Consejo de la Magistratura”, dijo uno de los verticalistas a este medio.

Frente este lote de irreductibles kirchneristas se cruzan en oposición, dos radicales: Hugo Castañón (rionegrino) y Linda Yagüe (neuquina). Al primero jamás le gustó el kirchnerismo. Incluso enfrentó a su propio bloque de diputados cuando este respaldó al kirchnerismo en la estatización de YPF. La segunda, una docente de 52 años y hablar muy sereno, confesó a este diario el estilo kirchnerista de ejercer el poder. “La llamada democratización de la justicia no es otra cosa que avasallamiento de la Justicia para lograr más impunidad en el manejo del poder. Votaré en contra… ¿Cómo voy a explicarle a mi gente de San Martín de los Andes y a todos los neuquinos que represento, que los estoy limitando en sus derechos” – dice.

En cuanto al MPN, el diputado José Brillo mostró en sus expresiones previas a la votación cierta autonomía de los designios K. Así, sentenció a este diario su hastío a la cultura que blande el gobierno nacional a la hora de bajar proyectos al Parlamento. Dijo: “Este tipo de leyes me recuerda que nosotros, especialmente los miembros de los partidos minoritarios en la cámara baja, estamos acostumbrados a vivir al límite frente a las urgencias del Ejecutivo. Lo primero que puedo decir es que me parece que la reforma aparece en un momento inoportuno, en términos muy urgentes, cuando por su trascendencia hay que trabajarlos muy responsablemente. Todo en un momento en que el país tiene un escenario económico complicado, perdiendo inversiones en función del desfasaje cambiario. A lo que se suman las consecuencias que se sufren debido a problemas climáticos. Es lamentable la actitud del gobierno de no dejar que se discuta el proyecto de ley”.

La bancada emepenista –integrada además por Alicia Comelli y Olga Guzmán no había fijado hasta anoche su posición.

polÉmica reforma judicial


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