Conflicto en el hospital de San Martín

SAN MARTIN DE LOS ANDES (ASM).- Trabajadores del hospital Carrillo inician la semana en estado de alerta en demanda de recategorizaciones y mejores condiciones de trabajo. No descartan instrumentar medidas de acción directa.

Sergio Vargas, delegado por ATE para el sector enfermería, dijo que los trabajadores están cansados de formular reclamos a las autoridades.

El entredicho involucra al personal hospitalario afectado a las llamadas «derivaciones pasivas» por urgencias (enfermeros, choferes, camilleros), que se producen desde otros centros asistenciales a este nosocomio de cabecera para la zona sur, o desde éste al hospital Castro Rendón.

Vargas explicó que los trabajadores afectados a esa tarea permanecen disponibles durante 10 días las 24 horas. Sin embargo, dijo que mientras en otros hospitales se paga una determinada categorización, en San Martín no ocurre lo mismo.

El dirigente puntualizó que «a los trabajadores del hospital Carrillo se les abona una diferencia de 140 pesos por ese trabajo, mientras que en otros hospitales de la provincia se pagan 297 pesos.»

Vargas dijo que el secretario González Vottero, de la subsecretaría de Salud Pública, «reconoce que los trabajadores están mal categorizados, por lo que (a modo de compensación) se puso un cupo adicional de 300 horas extras que sólo duró dos meses, enero y febrero».

Sostuvo que «los viáticos deberían pagarse en tiempo y forma como ocurre en otros hospitales pero no aquí».

El representante de ATE fue más allá del conflicto laboral, al sostener que «el hospital se está viniendo abajo y parece que (el gobierno) no se da cuenta».

El sindicalista explicó que hay carencia en recursos humanos y materiales, para «un hospital que en su momento fue pensado para atender las demandas de 5.000 personas y que hoy está en una ciudad de 25.000 habitantes, y que atiende derivaciones de toda la región».

Por ejemplo, explicó, que «no hay baños públicos en la guardia y la misma guardia no se condice con las necesidades que tiene el hospital». Dijo que «se optó por hacer una sala de terapia intensiva que no se utiliza porque no tiene certificación de finalización de obra, mientras se descartó ampliar la guardia cuando es una necesidad imprescindible».

Vargas sostuvo que hay 200 personas en el hospital y sólo tres diminutos cambiadores, que son utilizados también por los acompañantes de los pacientes.

El representante de los trabajadores enfatizó que «no se recibe la muda de ropa en tiempo y forma; falta más personal médico, de enfermería, cocina y choferes» entre otros.

Los ceramistas vuelven a cortar las calles de Neuquén

NEUQUEN (AN).- Los trabajadores de cerámica Zanon vuelven hoy a cortar las calles del centro de esta ciudad a partir de las 7,30. La protesta durará hasta conocer el resultado de una nueva reunión que mantendrán los dirigentes con las autoridades de la subsecretaría de Trabajo.

El secretario general de los operarios, Raúl Godoy, explicó que «las medidas de fuerza van a continuar hasta que la empresa ponga algo» y agregó que la decisión de rechazar el preacuerdo con la cerámica fue «unánime».

El viernes pasado parecía que el conflicto estaba solucionado, pero dos condiciones del acuerdo fueron rechazadas por los ceramistas: la exigencia de garantizar una producción de 600 mil metros cuadrados mensuales y una cláusula para evitar las asambleas en horario de trabajo. «Se borran un mes y después quieren imponer condiciones», dijo Godoy en alusión a los empresarios. Además opinó que «no es la provincia la que tiene que poner la plata».

El director provincial de Empleo, Ernesto Seguel, aseguró que «la provincia no se está poniendo al hombro a la empresa, sino que trata de evitar que 450 personas se queden sin trabajo», para lo cual «vamos a arbitrar todos los medios».

El convenio rechazado establecía para hoy el pago del 100 por ciento de los sueldos de marzo, el 50 por ciento de abril mañana y el resto diez días después, sin represalia para los huelguistas. La reunión de las partes de hoy se realizará entre las 9,30 y las 10 y no estaba asegurada la presencia de los representantes de la empresa.