Constructoras: piden fondos para reiniciar obras

Si bien el reajuste de costos está normado, los empresarios quieren percibir la actualizaciones antes de reiniciar los trabajos.

Obra Pública

El reajuste de costos está normado, pero el gobierno no logra reactivar sus obras paralizadas porque las constructoras requieren inicialmente percibir aquellas actualizaciones. Esas miradas confluyeron en una reciente reunión del gobernador Alberto Weretilneck con las principales constructoras de Río Negro. Allí, el mandatario reiteró su promesa de acelerar desembolsos mientras que los privados se repitieron en sus compromisos de activación de las construcciones.

Puntualmente, la provincia no logra reactivar y mejorar la ejecución de sus construcciones, a pesar de la preocupación expuesta por el mandatario después de la paralización de decenas de ellas. Existía optimismo con que el decreto 1313/14 -que estableció otro mecanismo de actualización de valores- y el decreto/ley N°4 -que lo hace retroactivo hasta enero del 2012- cubrirían las expectativas de las empresas entonces se reiniciarían las obras. No ocurrió automáticamente. El reinicio aún no se ha concretado, 40 días después de la primera normativa.

El encuentro sirvió para reiterar el compromiso gubernamental en acelerar los trámites y los pagos con el objetivo de equilibrar financieramente a las constructoras. Algunas aparecen con serias dificultades y afirman que no pueden retomar construcciones si no cobran antes. Los funcionarios dicen que los pagos dependen ahora de las tramitaciones y certificaciones que deben presentar las empresas. Igual, los privados se fueron con cierto exceptismo por los plazos. Por igual razón, se toman sus tiempos para cumplir con las reactivaciones, más allá de la vigencia de un cuadro jurídico más favorable.

La delegación de los constructores fue encabezada por el presidente de la Cámara, Juan Castelli y, entre otros participaron, Guillermo Gazzia (Construcciones Normalizadas), Raúl Pamer (Sylpa) y Alejandro Lozano. Weretilneck estuvo acompañado por el vicegobernador Pedro Pesatti, el ministro de Obras Públicas, Guillermo Gesualdo y su segundo, Alejandro Echarren, que además es el interventor del IPPV, y la titular del DPA, Raquel Morales.

La información oficial consignó que “se revisaron las obras que están en condiciones de retomarse y se logró el compromiso de las constructoras para la reactivación automática”, como también, se “avanzó sobre el Plan de Obras 2015”.

Gesualdo aseguró que “la reunión permitió acordar un esquema para dar impulso a aquellas obras que estaban un poco demoradas, o con poco nivel de certificación, como así también revisar algunas licitaciones importantes que se realizarán en los próximos meses”. También, Echarren valoró que el nuevo esquema de actualización “posibilitará poner en marcha proyectos y planes de obra pública previsas para el 2015”.

Castelli -según cita la información gubernamental- calificó la reunión de “muy positiva” mientras valoró que el gobierno dictó las normas de reajuste de valores. Destacó que es “muy importante para proseguir con la obra pública” entonces ratificó la existencia del “compromiso de retomar el ritmo de las obras y pactar con los distintos organismos ejecutores los planes de trabajo que permitan tener certeza sobre la finalización de las obras que están actualmente en ejecución”.

Piccini solicitó información

La deuda pendiente de Río Negro con las constructoras es una de las consultas planteada por la legisladora Ana Piccinini al gobierno provincial, enmarcada en la pretensión de disponer de la información necesaria frente al decreto de Necesidad y Urgencia que fija un reajuste retroactivo de costos en favor de las empresas.

Ese decreto ley está en la Legislatura y, todavía, no fue evaluado por el cuerpo. También es cierto que el simple paso del tiempo -90 días- lo puede convertir en ley si anteriormente no es rechazado. La legisladora Piccinini está planteado su discusión y, en principio, requirió información al ministro de Obras Públicas, Guillermo Gesualdo.

En su requerimiento, Piccinini pide precisiones de la deuda pero, también, saber “cuántas y cuáles son las obras” paralizadas, “cuándo se iniciaron, su estado actual y fecha de finalización”. Pregunta si la Nación suspendió los envíos, la “nómina de las firmas contratadas” en cada obra, y “qué grado de cumplimiento en el pago puede usted acreditar en lo que va de esta gestión de gobierno”.

Finalmente, pide que se “informe el detalle de obras que se encuentran en ejecución y finalizadas en este período de gobierno y que se hayan iniciado en la gestión anterior, indicando fecha de inicio del trámite administrativo y del inicio de obra de las mismas”.

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