Crece el enojo por la falta de controles en la trágica esquina

Ayer por la mañana este diario recorrió la zona y contó al menos 48 autos mal estacionados. En el sector donde el lunes pasado una mujer murió atropellada no había

NEUQUEN (AN).- «Nos hemos cansado de pedir controles y de reclamar semáforos ¿qué hacen los autos estacionados en la avenida San Juan? ¿por qué no andan los semáforos? Me parece que no quieren perjudicar al supermercado ni a la farmacia y por eso los inspectores no se acercan a ese lugar», se quejó ayer Digno Olivares, un vecino de la zona centro que está reclamando para que haya semáforos en la esquina de avenida San Juan y avenida Argentina, en Neuquén capital.

Luego de la muerte de una mujer que el lunes fue atropellada por un remise, los vecinos de ese sector multiplicaron sus reclamos y muchos de ellos se indignaron por las declaraciones del subsecretario de Obras Públicas de la municipalidad Carlos Cides, quien dijo que «en los archivos (de la comuna) no hay registro de ningún pedido de semáforos» y en ese línea agregó que está el semáforo de accionamiento manual que nadie usa.

Uno de los enojados fue Andrés Carré. «Le refuto: vivo a una cuadra de avenida Argentina y San Juan. El pulsador del semáforo (el dice que funciona) no sólo no funciona sino que encima el pulsador que está sobre la plaza está roto».

Carré apuntó también a los dichos de Cides, quien argumentó que no se puede colocar semáforos en una rotonda. «Le pido que explique cómo se colocaron y bajo qué términos los semáforos que rodean las calles del monumento a San Martín y los semáforos que están en avenida Argentina, Belgrano y Nueve de Julio pues ahí también hay rotondas», sostuvo.

Ayer al mediodía este diario recorrió el sector de la polémica y contó 48 autos estacionados junto a la línea cebreada de la avenida San Juan.

«Eso pasa todos los días ¿por qué no hay ninguna multa?», preguntó Digno Olivares, quien recordó una joven que hace unos seis meses fue atropellada en ese lugar y «ahora está en silla de ruedas, no es que sólo se lesionó la clavícula».

La lectora María Azar, quien se comunicó a la edición digital de este diario, dijo

que «todas las mañanas llevo a mi hija de seis años a la escuela y en más de una oportunidad casi nos atropellan porque los conductores no ceden el paso ni tampoco disminuyen la velocidad».La mujer dijo que «tres veces llamé por teléfono a la dirección de Tránsito Municipal para elevar mi queja. La primera, llamé a la Policía para que enviaran a un agente de tránsito y ellos me comunicaron que ese tema y los semáforos correspondían al ejido municipal. Cuando me comuniqué con dicha dependencia, los empleados me pasaron la llamada y se oía por detrás las voces que decían: «es por el tema de avenida Argentina y San Juan… por lo visto, ya estaban al tanto».

María agregó que en «esa oportunidad hablé con una tal Laura que me indicó que le iba a comunicar a su jefe pues no se encontraba allí en ese momento. En la segunda oportunidad, hablé con otro empleado (lamentablemente olvidé pedirle su nombre) y la tercera vez con una empleada y después de haberle explicado le pedí hablar directamente con su jefe».

Fue entonces que se comunicó con Nilda Paleo, una funcionaria de la municipalidad. «Ella entendía la situación perfectamente y me indicó que no había forma de que enviaran a un agente de tránsito, que eso dependía de otros superiores. El señor (Carlos) Cides por lo visto jamás pisó esa zona de la ciudad y si lo hizo, hizo (valga la redundancia) la vista gorda», protestó.

Finalmente razonó que «cuando un funcionario expresa que va a hacer algo yo me pregunto: ¿No tienen tiempo suficiente los funcionarios (que más de uno duerme la siesta) para cumplir con el trabajo por el cual se le paga el sueldo?».


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