Cruces y más cruces en el Consorcio de Riego

VIEDMA (AV).- La polémica por la política laboral entablada en el Consorcio de Riego del Valle Inferior (CRVI) no está terminada en virtud de que el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación suspendió ayer una audiencia de conciliación a que había convocado ante el despido de un trabajador y las reiteradas denuncias del Sindicato de Trabajadores del Saneamiento de Río Negro (SITSA) sobre la situación en la que se desempeñan los operarios. La entidad rechazó en forma terminante las acusaciones. El delegado regional, Gustavo Contreras, informó que la postergación del encuentro está relacionada con una presentación de los representantes legales del consorcio en el marco de una medida de “conciliación obligatoria” que obliga a retrotraer una cesantía y levantar el paro de actividades. Paralelamente dispuso convocar a un nuevo encuentro para el 31 de este mes. La disposición Nº 3 señala que “la medida dictada tuvo en miras el diálogo entre las partes, evitando se produzcan alteraciones a la paz social que impliquen perjuicios para la actividad económica y productiva de toda la región”. La secretaria general del Sindicato, Cristina Marcellini, cuestionó el incumplimiento de la medida dispuesta por la cartera laboral nacional debido a que no se acató la “conciliación obligatoria”. Consideró que existe persecución laboral como consecuencia de no haberle permitido al trabajador que se reincorpore a sus funciones. En el descargo público efectuado por el consorcio, su secretario Germán Tasca, desmintió la existencia de una “lista negra” de futuros despidos en los puestos laborales, y que el único despido estuvo motivado en un “proceso de reorganización” destinado a mejorar las funciones. Añadió que por lo tanto “se procedió a esta medida con el pago de indemnización legal”.

La audiencia en Trabajo se suspendió.