Cualidades de un artefacto no tan popular
La estufa de alto rendimiento conocida como estufa rusa es un artefacto de calefacción construido con ladrillos refractarios, que se caracterizan globalmente por tener excelentes rendimientos y otras cualidades de interés. Según el INTA, los distintos ensayos que se han llevado a cabo en varios institutos de Investigación del extranjero, arrojan rendimientos de entre el 84 al 93%, muy superiores a cualquiera de las otras estufas conocidas. Aseguran que si comparan una estufa común de hierro, estos rendimientos significan que las estufa rusa produce el mismo calor con 100 kilos de leña que una de hierro con 400 kilos. La estufa puede construirse directamente en el piso pero, para comodidad en la carga de la leña y en el manejo de la misma, es conveniente hacerla sobre una base de mampostería de unos 45 centímetros de alto y una pared de 15. En el caso de las estufa grandes se pueden construir con un ancho de 57 centímetros, un metro de alto y 80 de profundidad. En el casos de las chicas, 46 centímetros de ancho, 78 de alto y 71 de profundidad. Por último, se sabe que en los últimos años, se desarrollan en toda la región una serie de acciones de generación, adaptación y transferencia de tecnologías que tienen por destinatarios a la población en general, y al productor rural y su familia.
La estufa de alto rendimiento conocida como estufa rusa es un artefacto de calefacción construido con ladrillos refractarios, que se caracterizan globalmente por tener excelentes rendimientos y otras cualidades de interés. Según el INTA, los distintos ensayos que se han llevado a cabo en varios institutos de Investigación del extranjero, arrojan rendimientos de entre el 84 al 93%, muy superiores a cualquiera de las otras estufas conocidas. Aseguran que si comparan una estufa común de hierro, estos rendimientos significan que las estufa rusa produce el mismo calor con 100 kilos de leña que una de hierro con 400 kilos. La estufa puede construirse directamente en el piso pero, para comodidad en la carga de la leña y en el manejo de la misma, es conveniente hacerla sobre una base de mampostería de unos 45 centímetros de alto y una pared de 15. En el caso de las estufa grandes se pueden construir con un ancho de 57 centímetros, un metro de alto y 80 de profundidad. En el casos de las chicas, 46 centímetros de ancho, 78 de alto y 71 de profundidad. Por último, se sabe que en los últimos años, se desarrollan en toda la región una serie de acciones de generación, adaptación y transferencia de tecnologías que tienen por destinatarios a la población en general, y al productor rural y su familia.
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