De Europa a América, por la ruta de Colón

Un aventurero barilochense, amante de «todos los deportes» unirá las Islas Canarias con Venezuela, en un bote a remo, siguiendo una de las rutas del navegante genovés Cristóbal Colón en el siglo XV. Se llama Daniel Serenelli, tiene 55 años y volará el martes 12 desde Buenos Aires a Tenerife para preparar el desafío que, estima, se iniciará el 25 de este mes, desde la isla La Gomera.

Para este nuevo desafío, que asumió con más ímpetu después de que un grupo de empresarios de Bariloche, su ciudad natal, le restara el apoyo prometido, Serenelli cuenta con un bote especialmente construido «privilegiando que sea una balsa salvavidas en desmedro del espacio para moverse, descansar y acomodar la comida», cuenta. La nave tiene 7,50 metros de eslora, 1,60 de manga, 1,10 de alto, pesa 330 kilos vacía y 850 cargada, dispone de doble proa con orza de deriva y timón y fue construida en fibra de vidrio. Lleva tres pares de remos de 2,90 metros, construidos con madera de pino, laminados y encolados para darles mayor resistencia.

El aventurero calcula que la travesía le puede llevar entre 70 y 100 días, pero «depende de los vientos alisios. Ojalá que te permitan remar y que soplen como deben soplar», dice esperanzado. «La cosa es muy estimativa, porque depende también de la marea y las condiciones del tiempo. Acá no hay motor ni velas, solamente remos», subraya a cada momento, como para que no queden dudas. Un teléfono satelital que le llegará desde España será la única comunicación que tendrá con tierra en medio del mar; la comida le llegará desde Italia y contará además con abundante desalinizador argentino para potabilizar el agua durante el viaje.

Si todo sale bien, en enero o febrero, Daniel Serenelli estará dando las últimas remadas frente a las cosas de Venezuela, donde lo esperarán amigos argentinos y de otras partes del mundo «para destapar una botella de bebida espumante y celebrar la vida».