De otra planeta

Los números apabullan: fue el septuagésimo cuarto triunfo de su campaña, el cuarto en cuatro pruebas, sacó una diferencia en el campeonato de 16 puntos, o sea un triunfo y un segundo puesto… En el Gran Premio de San Marino, Michael Schumacher volvió a demostrar que es de otro planeta. Ayer superó al inglés Jenson Button y al colombiano Juan Pablo Montoya, con quien tuvo un leve roce.

Schumacher sigue siendo demoledor. A pesar de partir de la «pole», el británico Button tuvo que conformarse con la segunda posición, su mejor resultado en la categoría.

El último escalón del podio lo ocupó el colombiano Juan Pablo Montoya, quien festejó moderadamente e incluso se quejó. Con gesto muy serio, que en la primera curva de la segunda vuelta, Schumacher le «cerró la puerta». Fue cuando iban segundo y tercero después de Button que arrancó liderando la prueba.

«Me pregunto hasta cuándo va a poder seguir comportándose así sin ser sancionado», acusó Montoya.

El alemán se defendió señalando que siguió el radio de curva que pudo y que el leve roce no fue su culpa.

Cuarto al hilo. Pese largar segundo Schumacher volvió a demostrar que es el indiscutible número uno de la Fórmula 1 y cuenta por victorias sus pruebas en el Mundial.

Con cuarenta puntos en cuatro pruebas, el piloto de Ferrari parece lanzado hacia su séptimo título mundial.

En el autódromo «Enzo y Dino Ferrari» de Imola no dejó margen para las sorpresas. A pesar de la primera «pole» de Button, lograda el sábado ante la sorpresa de todos, que hacía pensar en una escapada del británico en la punta de la prueba, el milagro no tuvo lugar. Desde que el BAR-Honda entró a boxes para su primer reabastecimiento, en la novena vuelta, Schumacher agarró la punta y definió todo.

Si Button conservó sin tener que pelear su segundo puesto, Montoya tuvo que defender el tercero ante los ataques del español Fernando Alonso en las últimas vueltas. Lo mismo ocurrió para el quinto lugar, con el el italiano Jarno Trulli, y el brasileño Rubens Barrichello.

Nada cambia en la Fórmula 1. Largando primero o segundo, el resultado es el mismo. Schumacher arriba.