Una área natural protegida que está en situación de riesgo

El Parque Regional Bardas Norte (PRBN) es un área natural protegida de la ciudad de Neuquén. Tiene una superficie de más de 500 hectáreas.

Desde antes de su creación el PRBN es frecuentado por numeroso público de la ciudad y localidades aledañas, para actividades deportivas, educativas, culturales y de esparcimiento. Los mayores atractivos del parque son:

• El bosque artificial Juan Luis Antonini, con especies exóticas que fueron plantadas hace medio siglo con el objetivo principal de controlar los riesgos aluvionales, remplazando la jarilla y el coirón (especies naturales) por una cobertura verde que regenerara el suelo destruido por las avenidas pluviales. El bosque cuenta con senderos para caminatas, un circuito iluminado con farolas led. También cuenta con varios miradores panorámicos y máquinas para ejercicios disponibles al público.

• Senderos rústicos para caminatas diurnas y nocturnas (con linterna) por dentro de la geografía del PRBN. Son concurridos por diferentes grupos de toda edad, con interés de esparcimiento, programas de salud, entrenamiento y competencias deportivas. También cuenta con algunos senderos para bicicleta de montaña.

Dentro del PRBN también se encuentra la Plaza de las Banderas, ubicada en el extremo norte de la Avenida Argentina, que cuenta con un mástil de gran altura donde se enarbola la bandera argentina, una fuente con senderos interiores que la atraviesan y una explanada para esparcimiento y actividades al aire libre. Además existe un Observatorio Astronómico, sobre la calle Jesús María en un claro que separa dos secciones del bosque. Brinda actividades de observación como divulgación de conocimientos del rubro.

Una pista de motocross, otra de bicicross y parte de una cancha de golf se encuentran dentro del área, con autorizaciones que vencieron hace décadas, lo que está en revisión en el marco del status de protección dado por la legislación vigente.

Marco jurídico y funcional

La creación del PRBN, sus límites precisos, usos e instrumentos y condiciones para su gestión comunitaria fueron determinados por la ordenanza municipal Nº 9640 el 28/11/2002, que contiene como Anexo I un plano de delimitación y como Anexo II el objeto y conformación de la Unidad Técnica de Gestión Territorial correspondiente al parque, cuya conformación y funcionamiento sigue negada hasta el presente por el Ejecutivo municipal. Tuvo como antecedentes la ordenanza Nº 4538 de 1990 que creó el Parque Regional Público manteniendo el estado de dominio municipal de las tierras y declarando dicha zona como patrimonio paisajístico y urbanístico de la ciudad de Neuquén; la ordenanza Nº 7100 de 1995 que lo amplió; y la ordenanza Nº 8201 de fecha 10/7/1998, que aprobó el Código de Planeamiento y Gestión Urbano Ambiental de la Ciudad de Neuquén.

No obstante, las sucesivas intendencias fracasaron en la preservación del espacio, y como consecuencia el 13/11/2003 se dictó la ordenanza Nº 9887, declarándose el estado de emergencia ambiental del parque como consecuencia de la degradación que producían motocicletas y cuatriciclos circulando sin control.

Posteriormente y basado en la ley provincial 2594, el Concejo Deliberante creó por ordenanza Nº 11874 el Sistema Municipal de Áreas Naturales Protegidas (Simap), comprendiendo en primer lugar al PRBN, aumentando al máximo su status de protección ambiental para: I) Conservar la biodiversidad, manteniendo la diversidad genética de los ecosistemas, las especies autóctonas y silvestres tanto de flora como de fauna, y conservar el paisaje natural y cultural, las bellezas escénicas, los rasgos fisiográficos y las formaciones geológicas. II) Garantizar la implementación de programas educativos y de investigación en las áreas a proteger, promoviendo los valores y principios de conservación de la naturaleza, más toda acción que incentiva la participación ciudadana. III) Propiciar el desarrollo de actividades de bajo impacto promoviendo condiciones de restauración y recuperación de ecosistemas degradados.

Situación actual

¿Pero cuál es el estado del bosque?: un problema crónico es su riego ineficaz, perdiéndose por sequía alrededor de 4.000 árboles. La actual gestión municipal intentó una tala masiva de árboles en el parque, sin un plan de remediación que le fue reclamado judicialmente por la Defensoría del Pueblo de la Ciudad. El Municipio fue reclamado por la Justicia a presentar dicho plan, previo a continuar con la tala.

Hay espacios ocupados por actividades o barrios privados: dentro del área se encuentra un circuito de motocross y bicicross que no cuentan con autorizaciones vigentes, ni estudios de impacto y compatibilidad ambiental conforme el status de protección dada al área. Peor aún es la tolerancia municipal y la morosidad del Poder Judicial respecto a una flagrante usurpación de tierras, ya popularizada como la “toma vip”. Son casi 8 hectáreas, que permanecen alambradas para usufructo exclusivo de los vecinos de un barrio privado, donde viven funcionarios de los tres poderes del Estado municipal y provincial.

La Sindicatura Municipal dictaminó en abril que la ordenanza Nº 5736 que dio derecho de uso sin opción a compra de una fracción de 3,3 hectáreas de Parque y calle pública al barrio privado El Rincón Club de Campo venció en el 2012. Y que las 4,2 hectáreas restantes fueron ocupadas sin documento legal que lo autorice. Dictaminó también que el Municipio debió intimar para su devolución, deber que la Intendencia incumple hasta la fecha. Por el contrario propició la enajenación de las tierras en venta directa, lo que logró desactivarse por la movilización y reclamo de los ciudadanos decididos a recuperar el parque público.

También hay daños a las bardas dentro del parque: la intendencia arrasó hectáreas de barda en zona adyacente a la pista de motocross citada y promovió obras por mano de terceros al oeste de la misma, que motivaron reacciones ciudadanas y amparos ambientales ante el Poder Judicial, con intervención de la Defensoría del Pueblo, que se encuentran todavía en curso legal.

Hay venta de lotes que serían parte del PRBN: alertada por vecinos de la ciudad, la Defensoría del Pueblo interpuso acción legal contra la venta de dos lotes que serían parte del Parque, cuya mensura no ha cumplido la Intendencia municipal. (Licitación Púb. 1/18)

Como se vio, los representantes del pueblo (Concejo Deliberante) han creado y establecido los usos permitidos y protección del PRBN, pero las sucesivas intendencias vienen a contramano e incumpliendo sus deberes establecidos en las ordenanzas, lo que obliga a la defensa por medios judiciales y la movilización ciudadana.

Preocupa también la inacción de los organismos provinciales de Medio Ambiente, Áreas Naturales Protegidas y Recursos Hídricos, que debieran intervenir ya que todo lo que dañe o contamine al Parque se traslada al río Neuquén y su entorno interprovincial.

*Integrante del Foro Ciudadano para la Democracia de Neuquén y Multisectorial en Defensa del Parque Regional Bardas Norte

Las sucesivas intendencias vienen incumpliendo sus deberes establecidos en las ordenanzas, lo que obliga a la defensa por medios judiciales y la movilización ciudadana.

Rubén Gómez *

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Las sucesivas intendencias vienen incumpliendo sus deberes establecidos en las ordenanzas, lo que obliga a la defensa por medios judiciales y la movilización ciudadana.

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