Definen los mejores maestros: Rafa y Nole

La temporada 2013 del tenis se cerrará hoy con el mejor partido posible, un Rafael Nadal versus Novak Djokovic para definir quién de los dos se queda con el título del Masters de Londres. Número uno en el año, este trofeo es el último que le falta a Rafa, ganador de los cuatro de Grand Slam, el oro olímpico y la Copa Davis. Pese a la importancia de consagrarse como “maestro de maestros”, el español aseguró que si no vence a Nole el balance será el mismo. “Es un torneo importante, voy a intentarlo, a ver si lo consigo, pero no cambia nada”, afirmó. En la semi de ayer, Rafa exhibió otra vez su superioridad ante el enorme Roger Federer y lo batió 7-5 y 6-3. Fue la victoria 22 de Nadal sobre el suizo en 32 partidos, además de la cuarta del año ante un Roger que no sale victorioso en este duelo desde marzo de 2012, en Indian Wells. El choque fue presentado con la estética de un combate de boxeo en Las Vegas: focos apuntando al centro de la superficie azul y las gradas del O2 Arena oscurecidas, mientras la música latía. Nadal -lo sufren todos sus contendientes- hizo esperar a Federer un minuto en la red antes del sorteo. La lectura de logros en la temporada por parte del presentador marcó un contraste inédito entre los históricos rivales, ya que el número 1 tiene 10 torneos conquistados y dos Grand Slam, contra sólo una corona menor (en Halle) de Federer. Eso sí, cuando comenzó la lectura de sus 6 títulos en el Masters, el público ovacionó al suizo. Aquellos tiempos de predominio del suizo en el tenis veloz quedaron atrás, porque Federer tampoco pudo defender ya su preeminencia ante Nadal en partidos en superficies rápidas y techadas: tras cuatro victorias, perdió por primera vez ante RN en indoor. Lo mejor del partido estuvo en el set inicial, con Federer concentrado y dominante. La gran oportunidad le llegó sacando 2-3 y 15-40. Venía de conectar una gran derecha invertida y una buena serie de reveses, pero en el momento decisivo, con tres break points, llegaron los errores. El set parecía irse a las manos de Nadal cuando Federer encadenó tres errores en un juego que comenzó con una doble falta. Nadal se adelantó 5-4 y tenía la oportunidad de cerrar con su saque. No pudo, porque Federer ofreció un game conmovedor, con iguales dosis de mente y corazón en cada tiro hasta devolver el quiebre: 5-5. Pero la inestabilidad volvió a gobernar el juego del suizo en el undécimo game, con Nadal quebrando para poco después asegurarse el set por 7-5 en 43’. Prácticamente ahí se acabó el partido. Federer ya no tuvo resto físico, tenístico y mental para plantear la oposición del primer sets, y en 36 minutos entregó el segundo set por 6-3 y el partido. Todo lo emotivo de las semifinales se quedó en la primera, porque en el turno tarde, Djokovic no le dio ninguna chance a Stanislas Wawrinka, sin dudas el colado del cuarteto. Fue por un doble 63 en apenas 1h24m. A diferencia de Rafa, Nole irá por su tercer torneo de maestros, porque ya ganó en 2008 y 2012.