Definen posibles sanciones a Toledo

LIMA (AFP) – El Congreso peruano resolverá hoy una posible sanción al presidente Alejandro Toledo, acusado por una comisión parlamentaria de delitos de asociación ilícita para delinquir y contra la fe pública en un caso de adulteración de firmas en que habría incurrido su partido político.

Para que se apruebe una sanción al mandatario, se requieren de 80 votos, que son los dos tercios del total de miembros del Congreso unicameral, de 120 legisladores, lo que constituye una valla difícil de superar, según estiman los analistas políticos.

El oficialismo confía en que la acusación no prospere y que Toledo pueda concluir sin contratiempos su mandato el 28 de julio del próximo año. El mandatario fue sindicado de poseer «deméritos políticos que lo hacen incapaz de seguir al frente del gobierno» por el legislador independiente Edgar Villanueva, quien presidió la comisión investigadora parlamentaria. «El presidente ha mentido al país, ha mentido a la comisión «, subrayó el legislador al solicitar al Parlamento unicameral que como sanción ejemplar declare la vacancia presidencial por «incapacidad moral para gobernar».

El presidente del Congreso peruano, Antero Flores-Aráoz, destacó ayer la estabilidad política en Perú donde, a diferencia de sus vecinos Ecuador y Bolivia, el presidente sigue al frente del país pese a su baja popularidad y al permanente estado de protesta en las calles. «En el Parlamento del Perú no ha habido voluntad política para destituir al presidente de la República», dijo Flores-Aráoz al declarar sobre la estabilidad de las democracias andinas durante una reunión con la prensa extranjera. «Tampoco nos hemos embarcado en ninguna guerra (contra Toledo) para sacarlo».